Solo unos pocos hombres están dispuestos a ser héroes, cuando el sacrificio a enfrentar es la muerte. Esta sociedad se mueve por dinero,sí, pero piensa que en una situación límite, ese sacrificio fuese necesario para que el resto de la comunidad pudiera seguir viviendo.Y pregunto, ¿es justo llamar idiotas o ilusos a aquellos que dan su vida por los demás, aún sabiendo que esta sociedad es una farsa llena de hipocresía, que van a explotar literalmente para que el resto pueda seguir con sus vidas? Yo todavía me emociono cuando veo a un ser humano haciéndolo, y reconozco la grandeza de su acto.Me conmueve y me hace recuperar la fe en el hombre.
P.D:También te digo que mandar a la muerte al vecino es muy fácil, y que ningún miembro de la élite va a sacrificarse por nosotros...
Un saludo.
Estoy en gran parte de acuerdo con Vd. En una sociedad donde se nos mete el egoismo como virtud desde la mas tierna infancia ( y si no se te mete ya aprenderas en la calle a leche limpia ) es, si cabe, aún mas valioso y meritorio el que alguien se sacrifique por los demás a riesgo de su vida. Aunque no lo parezca, aún queda gente de ese palo. Poca, pero queda. Y yo también los admiro.
Ahora bien, una cosa es que admire a un tipo que ante un hecho fortuito e impredecible, como un incendio grave con personas atrapadas en un edificio se envuelve en una manta mojada y se tira a ciegas al edificio para intentar sacarlos, y otra que admirase al mismo personaje,
que conociendo y bien informado de los riesgos que supone una planta nuclear, y los cientos de defectos y errores peligrosos que se pasan por alto para obtener mas beneficio para los 4HDLGP de siempre a costa de la salud o incluso vida de la población, se presentase voluntario para ir de liquidador ante un hipotético accidente. Porque, en ese caso, mi admiración y apoyo iría para los que tuviesen un par para coger unas buenas luparas y llevar de "voluntarios" apagafuegos a todos los calvos, tertulianos,
hinjinieros, políticos, accionistas mayoritarios y
ejpertoh varios que graznan dia y noche sobre la absoluta seguridad de las centrales nucleares.