Empieza la fiesta: Abengoa, suspendida de cotización cuando subía un 70%: Moncloa presiona a la banca para que haya rescate

Para quien le guste, buen chicharro, se puede ganar mucho dinero de manera fácil.
 

Y en la cima de todas ellas la Administración Española, como última y responsable
solidaria.- Y ya sabemos ésta como está.- PIDIENDO RESCATE, SOS, MAYDAY, MAYDAY.-
Pero tranquilos, que no pare la música.-
 
Con esta empresa lo mejor es no hacer nada, dejarla caer. Otras empresas con un rescate (inyección de capital, quita de deuda, gran reestructuración de la deuda con buenas condiciones, etc.) salen adelante. Pero Abengoa es un pozo sin fondo que mejor dejar caer.
 
Ayer avancé algo en otro hilo, pero me decían que no.....

Ha sido antes de lo previsto, creo que lo han acelerado, a ver si el gobierno puede poner algún dinerito en la mesa, antes de que se. arruine del todo el pais
 
Pues nada, a bailarrrrrrrrrrr, bailarrrrrrrrrrrrrrrrrrr, bailarrrrrrrrrr, bailarrrrrrrrrrrrrrr
 
Luego todos los hdps que han tomado parte en este robo se pasean por platós, simposios, mítines y conferencias poniéndose chulos.

Cualquiera que haya pasado por eta o abengoa debería tener prohibido ostentar cargo público. Y viceversa.
 
Podemos ya ha rescatado a la británica IAG, ahora a Abengoa.

Vaya anticapitalistas.
 
progenitora mía, mantener una empresa por cuestiones políticas y no económicas. Al final están alimentando a un zombi, patada hacia delante. Y como siempre a palmar pasta los proveedores y los accionistas.
 
Lo que hay que examinar es por qué una empresa como Abengoa tiene 6000 kilos de deuda, y en qué shishi se ha gastado ese dinero.

Abengoa basó su negocio en montar mucha renovable con primas hiper infladas (termosolar, fotovoltaica, bio combustibles). Todos esos proyectos los financiaron a base de deuda concedida gracias a estos planes de negocio tan 'rentables'. Cuando llegaron los recortes y bajaron las primas estos proyectos se volvieron deficitarios y Abengoa no pudo afrontar a sus acreedores
 
Es la nueva Sniace. Volverá en forma de chicharro y pasará décadas arrastrándose por el mercado continuo hasta que nadie se acuerde ni a que se dedicaba ni quien la dirigía.
 
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