Los políticos, esos que muchos ingenuos foreros incluyen de manera reiterada en el grupo de funcionarios, cuando no lo son, son uno de los mayores problemas del país.
La estructura económico-legislativa de España es mucho más parecida a la de un país en vías de desarrollo, bananero para que nos entendamos, que el de una supuesta potencia económica occidental.
El grado de desfachatez y corruptela es de tal grado que ha sido denunciado hasta en múltiples informes de organismos de la propia CE.
En resumen, demasiada corruptela y gestión ineficiente, unido a una clase empresauria, que considera una pequeña empresa como un chiringuito exclusivamente montado para pegar el pelotazo del negocio de moda.
A veces el negocio ha sido vender bañeras de hidromasaje y otras poner un videoclub, o montar una tiendecita de productos informáticos, cuando no una franquicia para elaborar pizzas.
Sin duda el modelo de negocio pelotazo-estrella de la última década ha sido el ladrillo. Sector que tradicionalmente ha sido el mejor escenario para la corrupción, y fomentado por la lamentable mentalidad de la banca española y por las propias administraciones puesto que cuadraban el círculo, temporalmente, de como financiarse a sí mismas sin subir los impuestos directos o las retenciones.
El grave problema es que varias generaciones de políticos, banqueros y empresarios están absolutamente convencidos que la coyuntura actual es pasajera y que después de un par de años de reset, la situación de hace un par de años volverá a repetirse de nuevo.
Quizás los únicos que sean conscientes de que esto va para largo, puesto que saben como están sus agujeros contables de primera mano a pesar de que no salen a la luz pública, sean los bancos.
PP y PSOE son la misma hidra pero con distintas cabezas, pero no se sabe específicamente por qué crece el número de daltónicos y los que sólo ven el rojo ven una de las cabezas, la roja, y los otros sólo ven la azul.
El escenario político y la selección genética-política que han estado llevando a cabo estos, a través de sus medios de información afines, en la gleba, durante los últimos 30 años ha aumentado el número de daltónicos, de cada clase, de tal manera que diríase que ahora hay un inmenso rebaño de daltónicos. La gran mayoría.
Parece que los que vemos las dos cabezas estamos quedando en franca minoría y somos de los pocos que consideramos que el problema es sistémico y no exclusivamente partidista.
Hace falta tener muy poca idea de economía para pensar que el PSOE no ha estado haciendo una política, desde hace 6 años, prácticamente la misma que haría cualquier partido de centro derecha. La ineficiencia de esa gestión no es suficiente como para justificar que es la causa mayor. En otras palabras, para saber que esto se iba a tomar por trastero.
Seamos serios. Nuestro modelo se va a tomar por trastero, porque es una hez de modelo. nacido en los albores de las legislaturas de González, obsesionado con el ladrillo, hasta un grado superlativo, en los tiempos de Aznar y continuado, porque no había bemoles de cambiarlo, durante una legislatura y parte de otra, por Zapatero.
Como soy de los que buscan soluciones y no culpables lo que me interesaría saber es si ha nacido el político que tuviese los narices suficientes que harían falta para sacarnos de esta, esto es, inventar otro modelo. Y como sé que eso no ha ocurrido sólo queda, en mi escenario, la muerte por necrosis de este modelo a partir de ahora, o sea, un lustro de economía de cuasisupervivencia para un porcentaje de población inmenso y un: "luego ya veremos".
Sigan pensando en Blancanieves y los siete enanitos, y demás cuentos clásicos, que ya verán lo que nos vamos a divertir cuando vengan los guionistas de los cuentos gore.