Los comunistas que molan son los duros y en España es casi imposible encontrar intelectuales con una formación encomiable que tengan una cultura superior. Citaría dos ejemplos de ese estilo: Santiago Armesilla y Pedro Insua, ambos de la escuela de Gustavo Bueno.
Los comunistas rusos y chinos flipan en España, no quieren saber nada de ellos. Eso de las internacionales creo que se acabó para los gente de izquierdas españoles.