El hoax nuestro de cada día

Pues sí: es un bulo que sea un bulo.
¿Quién son los tres juntaletras que negaron que existan 445000 políticos? | Diario El Aguijón


*César Román es el director de Diario El Aguijón


Hace unos días surgió la polémica a cuenta de las declaraciones de Arturo Pérez Reverte en twitter sobre la existencia de 445.000 políticos en España, cifra que pedía disminuir de forma importante. La cifra fue publicada por Diario El Aguijón, en una magnífica y solvente información elaborada por Javier Fonseca en la que nos hacíamos eco de un informe elaborado por tres asesores de La Moncloa. Cuando alguien con el potencial mediático de Pérez Reverte hace unas declaraciones comoe estas, rápidamente se lía en las redes sociales. Sin embargo, en esta ocasión varios componentes más hicieron que la polémica tomara tintes kafkianos, cuando no carpentovetónicos, como se decía en La Codorniz. Y es que tres “señores” dedicaron sesudos artículos en blogs y en un digital para negar la mayor, llegando a la conclusión de que nuestra información era un bulo. Las ordas de partidarios y estómagos agradecidos a los políticos ya tenían con qué intentar argumentar contra el escritor. Y ahí que se lanzaron. No criticaban el trabajo elaborado por los asesores de La Moncloa que es el que da la cifra, sino que dedican sus dardos al medio que se hizo con el informe y que lo publicó. Se ve que les va eso de intentar apiolar al mensajero, y de entender de esa forma tan peculiar lo que es el derecho de la información. Parecen echar de menos la antigua ley de prensa, o simplemente son de los que les gusta andar con la manida manía de echar la culpa siempre al periodista. ¡Que malos son estos periodistas, que sacan lo que a mí no me gusta! ¡Como joroba la información cuando no sirve a mis intereses!

El tiro les ha salido por la culata, y tras la publicación de las imágenes del informe en nuestro diario, la tortilla se ha vuelto y la pregunta que ahora todo el mundo se hace es ¿porqué dijeron sin prueba alguna que era un bulo? ¿Intentó alguno de estos ilustres opinadores comprobar más allá de sus suposiciones lo que decían? Claro que no. Era mucho más fácil decir que era mentira, y punto. Muerto el perro, se acabó la rabia. Pero claro, la verdad sólo tiene un camino, y al final siempre sale a la luz. Desde que las imágenes del informe se publicaron, lo que ha quedado en evidencia son quienes negaron la información. Y es que a lo largo del tiempo que nuestro diario lleva trabajando, nunca hemos recibido ni una queja, ni una nota de rectificación a ninguna de nuestras informaciones. A esta tampoco, lo que dice mucho a favor de todos los profesionales de nuestra redacción.

Sin embargo, lo más interesante para saber porqué realizaron tal acusación es ver quienes son los tres personajes de marras y seguramente nuestros lectores sabrán, a renglón seguido, cuáles son los motivos que les llevan a asegurar tales acusaciones.

El primero de ellos es un tal Enrique Bethencourt, que parece que fue el primero en publicar en su blog “La tiradera” un artículo diciendo que los 445.000 políticos eran un de bulo. ¿Qué argumentos esgrime para llegar a semejante conclusión? Pues nada más y nada menos que a él le parecen muchos, y que algunos datos no le cuadran. No ha visto el informe, no sabe cómo se gestaron los datos, pero concluye que los datos no cuadran, y de ahí pasa a asegurar que es falso. Tremenda objetividad. Pero sobre todo se basa en que él no considera políticos más que a los que han sido elegidos por las urnas. Si aplicamos su “lógica aplastante” resulta que no hay más políticos que los diputados y los concejales.Vamos, que va a ser, según el tal Bethencourt, que los partidos no colocan a los suyos en la administración, y que a los colocados, no se les tiene que calificar de políticos. Parece que quiere que les llamen funcionarios o empleados públicos, para que así pasen más desapercibidos, y que cuando lleguen los recortes, echen a los interinos a la calle, en lugar de a ellos. El tremendo analista va más allá en todo un alarde de “objetividad” y se atreve a señalar que en realidad no son 445.000 sino 100.000. ¿Y porqué? Pues porque sí. Así sin ningún dato más. Él, que se erige en censor de la información de los demás y exije rigor y datos contrastados, se permite dar una cifra sin el menor contraste, sin la menor fuente, y sin nada. Lo ancho para ti, lo estrecho para mí.

Pero lo mejor llega cuando nos vamos a su blog y miramos a ver quién es este individuo que se permitirt subir al púlpito y dictar qué es verdad y qué es mentira. Resulta, ¡qué casualidad!, que Enrique Bethencourt ha sido el jefe de prensa del tumultuoso Gobierno de Canarias entre 1999 y 2003 con Román Rodríguez, y anteriormente fue el jefe de prensa de la Consejería de Educación también en Canaras entre 1993 y 1999. Vamos que fue el que durante 10 años, en uno de los gobiernos con más escándalos por corrupción ha tenido Canarias, se dedicaba a dar las versiones oficiales y defender ante las cámaras a los políticos, además de repartir a los medios la tartita de la publicidad institucional. Ante el dato, me da por levantar el teléfono y llamar a algunos compañeros de medios canarios para ver qué tal es este tipo, y ¡que casualidad de nuevo! que me dicen de todo de él, menos bonito, sobre todo en lo relacionado con el reparto de subvenciones a periódicos, y demás. ¡Claro que no le gusta la información! ¿Cómo le iba a gustar siendo él uno de esos 445.000 políticos?, ¿o prefiere llamarle cargos politizados, o nombrados a dedo o mamporreros del partido de turno?

Pero lo mejor de todo, es que se permite presentase como periodista. Curioso. Sobre todo, si tenemos en cuenta que según él mismo cuenta, es Licenciado en Filosofía y Ciencias de la Educación. Vamos que de periodista, nada de nada. Y este bocachanclas agradecido a los políticos nacionalistas canarios, que ha navegado entre las más gráciles corruptelas isleñas, y que practica el, llamémoslé, intrusismo en el periodismo, es quien se permite el lujo de criticar el trabajo de un profesional de la comunicación como Javier Fonseca, con más de 30 años de profesión a sus espaldas, y que ha sido profesor de periodismo en tres universidades diferentes. Como siempre, habla el que más tiene que callar, y el que más tiene que agradecer.


Los otros dos juntaletras lo único que hicieron fue un copipaste, les ahorro la lectura.
 
César Román Viruete, gran personaje…

Secretario del Sindicato de Enseñanzas Medias de la Falange en su juventud, fue expulsado de su instituto cuando a los 22 años cursaba 1º de BUP con niños de 14 años por falsear un título. Boicoteó manifestaciones de CCOO infiltrándose, colaboró con la Fundación Francisco Franco, montó un sindicato que no tuvo éxito, fue presidente de la versión madrileña del xenófobo Josep Anglada, denunciando a la Policía a cientos de pagapensiones. Profesionalmente se dedicó a la hostelería (como indica su alta en autónomos) donde ha sufrido innumerables inspecciones de Trabajo y Sanidad con más miles de euros en multas. Ha sido también denunciado por evasión de impuestos y sus restaurantes (como Olar de Gunter ó “Cervecerías de aquí a la cama”) han quebrado siempre. Igualmente ha sido condenado por emplear a trabajadores sin contratoy por otros asuntos, declarándose insolvente (aunque en 2011 ha sido condenado a pagar más de 42.000€ de indemnizaciones). Militó en el CDS donde el presidente tuvo que llamar a la Policía para salir de su propia sede ante las coacciones de César Román, y posteriormente fundó el partido El Centro, de donde fue expulsado. En resumen, ha sido expulsado de todos los partidos donde ha militado. César Román Viruete fundó el Diario El Aguijón desde una empresa llamada “Arquero y Brull”, que tiene cierta vinculación con la operación Malaya, y un compañero suyo ha afirmado sin reparos que pasó por la guandoca.

Quien quiera más información o corroborar lo dicho con pruebas (ABC, BOE´s , etc…), puede consultar Csar Romn Viruete - Biografa - cesarromanviruete.host22.com
 
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