El hilo de la vitamina D.

toberal

Madmaxista
Desde
31 Oct 2011
Mensajes
70
Reputación
225
La fruta esclerosis multiple es una enfermedad absolutamente atroz, no llega al nivel de la ELA, pero te aseguro que a veces desearía morirme y eso que la enferma es mi mujer...

Gracias a este protocolo tenemos un rayito de esperanza, aunque en el caso de mi mujer cuesta bastante debido a la agresividad de sus em. Al parecer llevamos unos meses con la enfermedad detenida, ahora, de ahí a recuperar movilidad...
Lo siento por lo que estáis pasando. Debe ser muy duro. Pero espero que todo os irá bien, aunque lleve su tiempo y sea duro el camino. Mucho ánimo.
 

toberal

Madmaxista
Desde
31 Oct 2011
Mensajes
70
Reputación
225
Para Hashimoto podrias probar también con selenio.
Venden pastillas de 200mcg.
Gracias.
La verdad es que hubo una temporada que probé con el selenio. Primero tomaba un puñado de nueces de brasil (al parecer son de los alimentos más ricos en selenio), y luego acabé tomándolo en suplementos. También he dejado el gluten (apenas lo como 2 o 3 veces en todo el año), tomo magnesio, hago ejercicio, e intento evitar el estrés. (aunque esto último es más difícil de controlar, por circunstancias personales; cuanto menos estrés mejor, en las enfermedades autoinmunes)
A pesar de todo esto, sigo teniendo los anticuerpos elevados, pero a mucha gente, con sólo dejar el gluten, por ejemplo, le bajan. Y otra gente necesita tocar más teclas.
Aún así, mis sintomas en comparación con otra gente, son muy leves. Y supongo que todo lo que hago en cuanto a dieta, ayuno intermitente, y ejercicio, tendrá mucho que ver en eso.
Se supone que las autoinmunes son incurables, o eso nos dicen. Por eso el Protocolo Coímbra es una puerta a la esperanza.
 

toberal

Madmaxista
Desde
31 Oct 2011
Mensajes
70
Reputación
225
Llevo desde 2015 tomando unos 20.000 UIs diarias, junto con 7 gr de EPA+DHA, unos 500 mcg de Mg, vita K2, etc.

Por temporadas he tomado algo más, o algo menos, pero calculo que por ahí rondará la media.


Hasta 2015 tenía asma relativamente controlado, pero desde 2017 en la práctica no tengo síntomas. También dos brotes de psoriasis graves, en 2010 (curada finalmente con ciclosporina) y 2015 (el que provocó que aumentara las dosis de suplementos a lo que indico arriba), en esta último desapareció en un mes y medio sin un solo fármaco. Desde entonces ningún nuevo brote.
Muy interesante lo que comentas.
Yo me empecé a interesar por la vit d a raíz de leer un libro donde se probaban los efectos en la salud de tomar dosis altísimas de vit d.
Según Jeff Bowles, cuando tomamos mucha vit d, el cuerpo lo interpreta como que hay abundancia de comida y recursos en el entorno. Y entonces entra en modo reparación. Por el contrario, cuando está baja, interpreta el cuerpo que hay carestía, y entra en modo ahorro de energía. Y por eso no autorepara dolencias o problemillas para no gastar recursos.
Cuando compré el libro, de hecho, tomé varios días sobre cien mil u.i y me desapareció una molestia en la rodilla que arrastraba hacía años.
 

toberal

Madmaxista
Desde
31 Oct 2011
Mensajes
70
Reputación
225
Muy interesante lo que comentas.
Yo me empecé a interesar por la vit d a raíz de leer un libro donde se probaban los efectos en la salud de tomar dosis altísimas de vit d.
Según Jeff Bowles, cuando tomamos mucha vit d, el cuerpo lo interpreta como que hay abundancia de comida y recursos en el entorno. Y entonces entra en modo reparación. Por el contrario, cuando está baja, interpreta el cuerpo que hay carestía, y entra en modo ahorro de energía. Y por eso no autorepara dolencias o problemillas para no gastar recursos.
Cuando compré el libro, de hecho, tomé varios días sobre cien mil u.i y me desapareció una molestia en la rodilla que arrastraba hacía años.
Por cierto, comentabas que también tomas vit k2.
Jeff Bowles comenta en su libro que tomar dosis muy altas de vit d3 no era peligroso, siempre y cuando se tomase la vit d3 con vit k2.
La vitamina k2 evitaría que se formase depósitos de calcio en los tejidos blandos, y así se podrían tomar cien mil o doscientas mil u.i. sin peligro de toxicidad.
En el protocolo Coímbra no sé si indican tomar vit k2. Pero sí que hay que adaptar la dieta, eliminando lácteos y otros alimentos ricos en calcio.
 

nada2

Madmaxista
Desde
25 Feb 2021
Mensajes
5.814
Reputación
11.415
Creo que no, y en dos dias apenas se notará nada.
Yo tomo 4000u al dia desde hace años y no me afecta.
 

kikepm

Será en Octubre
Desde
29 Oct 2011
Mensajes
17.383
Reputación
62.243
Lugar
Madrid
Muy interesante lo que comentas.
Yo me empecé a interesar por la vit d a raíz de leer un libro donde se probaban los efectos en la salud de tomar dosis altísimas de vit d.
Según Jeff Bowles, cuando tomamos mucha vit d, el cuerpo lo interpreta como que hay abundancia de comida y recursos en el entorno. Y entonces entra en modo reparación. Por el contrario, cuando está baja, interpreta el cuerpo que hay carestía, y entra en modo ahorro de energía. Y por eso no autorepara dolencias o problemillas para no gastar recursos.
Cuando compré el libro, de hecho, tomé varios días sobre cien mil u.i y me desapareció una molestia en la rodilla que arrastraba hacía años.
Os contaré con más detalle como llegué a la conclusión de tomar las cantidades de suplementos que tomo.

Fue un proceso evolutivo, que partió originalmente de que en 2003 empecé a tener ataques de asma. Como a todo paciente que va al médico, en mi caso alergólogos y neumólogos, me prescribieron corticoides y broncodilatadores inhalados.

Así estuve unos años, con crisis más o menos molestas, que joroban el sueño ya que un asmático no bien controlado ventila mal, lo que produce ansiedad con la dificultad para conciliar el sueño.

Alguna vez planteé a mi neumóloga sobre la posibilidad de controlar el asma por medio de la alimentación, pero lo descartó por completo.

Hacia 2007-2008 cayó en mis manos un libro de nutrición sobre la dieta de la zona, de Barry Sears. Este buen hombre plantea que vivimos en un mundo de alimentación inflamatoria. En las primeras páginas del libro plantea las teorías en que basa su sistema (40-30-30 en porcentaje de calorías de los macronutrientes Hidratos-Grasas-Proteinas), y lo que me llamó profundamente la atención es que decía cosas que eran para mi totalmente plausibles:

- nos alimentamos de carbohidratos altamente densos en energía, lo que es un invento reciente del neolítico, producto de la agricultura.
- comemos muchos alimentos procesados no naturales, con enormes cantidades de azúcares en forma de siropes, jarabes de fructosa y otros alimentos proinflamatorios.
- comemos muchos alimentos con altas concentraciones de omegas 6, lo que altera el equilibrio natural entre omega 3 y omega 6, siendo este último precursor de hormonas proinflamatorias, mientras que los omega 3 EPA y DHA producen hormonas antiinflamatorias.

Solo con estos datos, empecé a entrever que podría existir una relación entre la inflamación (el asma no es otra cosa que una hiperreactividad pulmonar, una especie de bronquitis permanente), y la alimentación, aunque entonces aún era una relación a entender.

Barry Sears llega más allá y afirma que todo tipo de enfermedades inflamatorias provienen de una mala alimentación basada en carbohidratos muy calóricos, no solo asma, sino Chron, artritis, diabetes, e incluso cánceres.

Así que empecé a suplementar omega 3, al principio de marcas mediocres, e inicié un proceso de mejora de mi alimentación, retirando muy poco a poco harinas y azúcares.

Hacia 2010 había reducido de mi dieta harinas, pasta y azúcar, pero no totalmente, además, suplementaba con omega 3, en dosis de pocos gramos y mi asma había mejorado de forma significativa, aúnque seguía teniendo crisis y seguía tomando los fármacos de forma cotidiana.

En ese año por motivos que no vienen al caso pasé una temporada de gran estrés, y empecé a tener un brote de psoriasis, muy lento y leve al principio.

En unos meses se descontroló y tras medio año probando distintos fármacos (corticoides tópicos, corticoides con vitamina D), la dermatóloga me prescribió ciclosporina (un inmuno supresor que se da a transplantados), lo cual terminó cortando el brote de psoriasis.

Por aquel tiempo seguía leyendo sobre inflamación y dieta todo lo que pillaba, y llegué a la vitamina D. Se la relacionaba con un efecto inmuno modulador, y sobre todo antiinflamatorio. En vista de que todo parecía estar relacionado, aún no sabía hasta que punto, empecé a tomar vitamina D, y en poco tiempo más Magnesio, y la K2 para eliminar la posibilidad de que se produjera calcificación de los tejidos blandos (que es un efecto de la hipervitaminosis D).

Así que me encontraba en 2012 o 2013 tomando dosis bajas de suplementos, comiendo relativamente sano (aún no había abandonado del todo azúcares y harinas), y con un asma medio controlado, pero seguía tomando diariamente el corticoide para desinflamar los pulmones, y el broncodilatador cada pocos días que tenía un ataque asmático.

Se produjo en 2015 algo que me hizo cambiar la forma de enfocar todo el asunto. Hacia mediados de marzo-abril tuve un brote de psoriasis, que en muy poco tiempo amenazaba con ser tan grave como el de 2010.

Decidí, en vista de que los suplementos y la mejor alimentación habían supuesto una mejora evidente en mi asma, y que todo era parte de un proceso inflamatorio generalizado, aumentar drásticamente la dosis de suplementos, y abandonar azúcares, pan, pasta, patatas, y todo tipo de carbohidratos de alta carga glucémica.

La consecuencia fue que el brote de psoriasis se detuvo en pocas semanas, y en un mes y medio la piel se aclaró totalmente (situación que sigue hasta hoy). Destruí la psoriasis con las dosis diarias siguientes, que mantengo más o menos a día de hoy:

7,2 gr de EPA + DHA puros
22.000 U.I. de Vitamina D (20.000 de la marca Life Extension líquida, 10 gotas a razón de 2.000 U.I.s por gota, más 2.000 de un multivitamínico)
2 pastillas del antedicho multivitamínico.
500 mcg de Mg
2.000 mcg de vitamina K2 (100 de los cuales de MK7)

Como efecto inesperado, en unos días el asma prácticamente DESAPARECIÓ.

Digamos que en ese momento entendí que las ideas de Sears tenían una base de verdad muy importante, aunque seguía achacando a los corticoides inhalados algún tipo de función.


Hacia 2018 ocurrió que mi médico de cabecera, tras relatarle la parte de esta historia que un médico podría aceptar, me propuso bajar la dosis de corticoide a la mitad. A la de unas semanas, no noté ningún empeoramiento, y pensé que el mix suplementos-alimentación no inflamatoria y corticoide seguía siendo la correcta.

Pero el asma no se eliminaba por completo, seguía teniendo algunos ataques.

Entonces, en unos meses, por error no tuve el corticoide inhalado en casa y estuve varios días sin poder utilizarlo.

Pensé, seguro que mi asma empeora, y entonces sucedió algo, mi asma aún mejoró más, hasta el punto de que dejé de tener ni tan siquiera los ataques espaciados y suaves que aún tenía.


Llegué a la conclusión de que el corticoide estaba siendo contraproducente por una razón que me resultaba difícil de explicar a la luz de las teorías médicas al uso. La explicación que he razonado es la siguiente:

Los corticoides son inmuno supresores. Cuando alguien suprime el sistema inmune, la inflamación cesa casi por completo allá donde se aplica. Pero el corticoide no permite al tejido recuperar su estado NORMAL. De hecho, en tratamientos prolongados con altas dosis de corticoides, su supresión implica una recidiva GRAVE. El sistema inmune reacciona más allá de la normalidad, este efecto fue evidente en la primera crisis de psoriasis en 2010, cuanto más corticoide ponía en mi piel, más agresiva se volvía la psoriasis, en una especie de guerra fría entre el armamento inmunosupresor y la reacción creciente del sistema inmune si no subía la dosis de corticoide. Este conocimiento fue lo que me indujo a evitar un tratamiento farmacológico, no quería probar de nuevo con la ciclosporina (que no deja de ser la bomba atómica de los tratamientos inmunosupresores) y probé a aumentar las dosis de suplementos y reducir a cero la alimentación inflamatoria.

En mi caso, el corticoide ya no estaba haciendo nada útil y solo suprimía la acción natural de mi sistema inmune, evitando la vuelta a la normalidad de mis pulmones. Al retirarlo por completo, todo volvió a la normalidad no inflamatoria de una persona sana, situación en la que sigo a día de hoy (salvo en aquellos momentos en que me doy un homenaje y tomo alimentos inflamatorios, que me producen un asma mucho más suave que hace años).

Hoy en día a los suplementos citados arriba, añado Zn y vitamina C, esta última a demanda ya que cuando como mal y tengo algo de asma (habitualmente asociado a rinitis y sinusitis), noto que me desinflama y me permite dormir mucho mejor.


Espero que os sea de utilidad.
 
Última edición:

djun

Será en Octubre
Desde
21 Abr 2012
Mensajes
33.309
Reputación
83.040
Os contaré con más detalle como llegué a la conclusión de tomar las cantidades de suplementos que tomo.

Fue un proceso evolutivo, que partió originalmente de que en 2003 empecé a tener ataques de asma. Como a todo paciente que va al médico, en mi caso alergólogos y neumólogos, me prescribieron corticoides y broncodilatadores inhalados.

Así estuve unos años, con crisis más o menos molestas, que joroban el sueño ya que un asmático no bien controlado ventila mal, lo que produce ansiedad con la dificultad para conciliar el sueño.

Alguna vez planteé a mi neumóloga sobre la posibilidad de controlar el asma por medio de la alimentación, pero lo descartó por completo.

Hacia 2007-2008 cayó en mis manos un libro de nutrición sobre la dieta de la zona, de Barry Sears. Este buen hombre plantea que vivimos en un mundo de alimentación inflamatoria. En las primeras páginas del libro plantea las teorías en que basa su sistema (40-30-30 en porcentaje de calorías de los macronutrientes Hidratos-Grasas-Proteinas), y lo que me llamó profundamente la atención es que decía cosas que eran para mi totalmente plausibles:

- nos alimentamos de carbohidratos altamente densos en energía, lo que es un invento reciente del neolítico, producto de la agricultura.
- comemos muchos alimentos procesados no naturales, con enormes cantidades de azúcares en forma de siropes, jarabes de fructosa y otros alimentos proinflamatorios.
- comemos muchos alimentos con altas concentraciones de omegas 6, lo que altera el equilibrio natural entre omega 3 y omega 6, siendo este último precursor de hormonas proinflamatorias, mientras los omega 6 EPA y DHA son antiinflamatorias.

Solo con estos datos, empecé a entrever que podría existir una relación entre la inflamación (el asma no es otra cosa que una hiperreactividad pulmonar, una especie de bronquitis permanente), y la alimentación, aunque entonces aún era una relación a entender.

Barry Sears llega más allá y afirma que todo tipo de enfermedades inflamatorias provienen de una mala alimentación basada en carbohidratos muy calóricos, no solo asma, sino Chron, artritis, diabetes, e incluso cánceres.

Así que empecé a suplementar omega 3, al principio de marcas mediocres, e inicié un proceso de mejora de mi alimentación, retirando muy poco a poco harinas y azúcares.

Hacia 2010 había reducido de mi dieta harinas, pasta y azúcar, pero no totalmente, además, suplementaba con omega 3, en dosis de pocos gramos y mi asma había mejorado de forma significativa, aúnque seguía teniendo crisis y seguía tomando los fármacos de forma cotidiana.

En ese año por motivos que no vienen al caso pasé una temporada de gran estrés, y empecé a tener un brote de psoriasis, muy lento y leve al principio.

En unos meses se descontroló y tras medio año probando distintos fármacos (corticoides tópicos, corticoides con vitamina D), la dermatóloga me prescribió ciclosporina (un inmuno supresor que se da a transplantados), lo cual terminó cortando el brote de psoriasis.

Por aquel tiempo seguía leyendo sobre inflamación y dieta todo lo que pillaba, y llegué a la vitamina D. Se la relacionaba con un efecto inmuno modulador, y sobre todo antiinflamatorio. En vista de que todo parecía estar relacionado, aún no sabía hasta que punto, empecé a tomar vitamina D, y en poco tiempo más Magnesio, y la K2 para eliminar la posibilidad de que se produjera calcificación de los tejidos blandos (que es un efecto de la hipervitaminosis D).

Así que me encontraba en 2012 o 2013 tomando dosis bajas de suplementos, comiendo relativamente sano (aún no había abandonado del todo azúcares y harinas), y con un asma medio controlado, pero seguía tomando diariamente el corticoide para desinflamar los pulmones, y el broncodilatador cada pocos días que tenía un ataque asmático.

Se produjo en 2015 algo que me hizo cambiar la forma de enfocar todo el asunto. Hacia mediados de marzo-abril tuve un brote de psoriasis, que en muy poco tiempo amenazaba con ser tan grave como el de 2010.

Decidí, en vista de que los suplementos y la mejor alimentación habían supuesto una mejora evidente en mi asma, y que todo era parte de un proceso inflamatorio generalizado, aumentar drásticamente la dosis de suplementos, y abandonar azúcares, pan, pasta, patatas, y todo tipo de carbohidratos de alta carga glucémica.

La consecuencia fue que el brote de psoriasis se detuvo en pocas semanas, y en un mes y medio la piel se aclaró totalmente (situación que sigue hasta hoy). Destruí la psoriasis con las dosis diarias siguientes, que mantengo más o menos a día de hoy:

7,2 gr de EPA + DHA puros
22.000 U.I. de Vitamina D (20.000 de la marca Life Extension líquida, 10 gotas a razón de 2.000 U.I.s por gota, más 2.000 de un multivitamínico)
2 pastillas del antedicho multivitamínico (que contenían además 2.000 U.I.s de vit D).
500 mcg de Mg
2.000 mcg de vitamina K2 (100 de los cuales de MK7)

Como efecto inesperado, en unos días el asma prácticamente DESAPARECIÓ.

Digamos que en ese momento entendí que las ideas de Sears tenían una base de verdad muy importante, aunque seguía achacando a los corticoides inhalados algún tipo de función.


Hacia 2018 ocurrió que mi médico de cabecera, tras relatarle la parte de esta historia que un médico podría aceptar, me propuso bajar la dosis de corticoide a la mitad. A la de unas semanas, no noté ningún empeoramiento, y pensé que el mix suplementos-alimentación no inflamatoria y corticoide seguía siendo la correcta.

Pero el asma no se eliminaba por completo, seguía teniendo algunos ataques.

Entonces, en unos meses, por error no tuve el corticoide en casa y estuve varios días poder utilizarlo.

Pensé, seguro que mi asma empeora, y entonces sucedió algo, mi asma aún mejoró más, hasta el punto de que dejé de tener ni tan siquiera los ataques espaciados y suaves que aún tenía.


Llegué a la conclusión de que el corticoide estaba siendo contraproducente por una razón que me resulta difícil de explicar.


Los corticoides son inmuno supresores. Cuando alguien suprime el sistema inmune, la inflamación cesa casi por completo allá donde se aplica. Pero el corticoide no permite al tejido recuperar su estado NORMAL. De hecho, en tratamientos prolongados con altas dosis de corticoides, su supresión implica una recidiva GRAVE. El sistema inmune reacciona más allá de la normalidad (este efecto fue evidente en la primera crisis de psoriasis en 2010, cuanto más corticoide ponía en mi piel, más agresivamente se volvía la psoriasis, era una guerra fría entre el armamento inmunosupresor y la reacción del sistema inmune en cuanto no subía la dosis. Este conocimiento fue lo que me indujo a evitar un tratamiento farmacológico y probar a aumentar las dosis de suplementos y reducir a cero la alimentación inflamatoria).

En mi caso, el corticoide ya no estaba haciendo nada útil salvo suprimir la acción normal de mi sistema inmune en los pulmones. Al retirarlo por completo, todo volvió a la normalidad no inflamatoria de una persona sana, situación en la que sigo a día de hoy (salvo cuando me doy un homenaje y tomo alimentos inflamatorios, que me producen ataques de asma, mucho más suaves que hace años).


Espero que os sea de utilidad.
Si evitas totalmente la lactosa (lácteos en general), el gluten, cereales, pastas, harinas y procesados..., creo que puede ser una gran ayuda. Es cuestión de probar. No vale decir "he reducido su consumo". Hay que evitarlo por completo. Y si incorporas el ayuno intermitente, moderadamente, sin que te cree estrés, también es una buena ayuda. Ayuda a reparar y recuperar tu sistema inmune. En cualquier caso nunca hay por qué comer mas de dos veces diarias. No es bueno comer muchas veces al día.
El proceso que has seguido en general es bueno. Te has acercado a una alimentación antiinflamatoria, una alimentación evolutiva.
 
Última edición:

kikepm

Será en Octubre
Desde
29 Oct 2011
Mensajes
17.383
Reputación
62.243
Lugar
Madrid
Si, el multivitamínico es Two-per-day, exactamente. Aunque hace años que lo dejé de tomar, no encontré relación de mejoría con su toma, pero desde luego es con toda probabilidad el mejor del mercado.

Me reía yo de los multivitamínicos que recetaban a mi madre u otros familiares, comparaba dosis y era para echarse a llorar. Igual que los omega 3 que recetan para temas de ojos, o dicho sea de paso los envases de vitamina D.


¿Por cierto, como obtienes una analítica de omega 3/6, lo pides al médico en una analítica normal?
 

kikepm

Será en Octubre
Desde
29 Oct 2011
Mensajes
17.383
Reputación
62.243
Lugar
Madrid
Si evitas totalmente la lactosa, el gluten, harina y procesados..., creo que puede ser una gran ayuda. Es cuestión de probar. No vale decir "he reducido su consumo". Hay que evitarlo por completo. Y si incorporas el ayuno intermitente, moderadamente, sin que te cree estrés, también es una buena ayuda. Ayuda a reparar y recuperar tu sistema inmune. En cualquier caso nunca hay por qué comer mas de dos veces diarias. No es bueno comer muchas veces al día.
El proceso que has seguido en general es bueno. Te has acercado a una alimentación antiinflamatoria, una alimentación evolutiva.
Exacto. Tuve que reducir a CERO la toma de harinas, pastas, azúcares, etc., para obtener resultados óptimos. Pequeñas cantidades de pan me producían asma invariablemente.

Sin embargo con el gluten nunca he tenido problemas, me hice pruebas de alergias varias veces y los médicos no encontraban relación.

De hecho tuve una discusión con mi médico de cabecera tras la última prueba. Le dije, no importa lo que digan las pruebas, mi asma no es una condición alérgica sino INFLAMATORIA.

En mi ingenuidad le expliqué que el sistema inmune tiene dos vías de reacción, una rápida, radical y aguda, lo que llamamos reacción alérgica, y otra de menor intensidad, lo que sería la inflamación, que puede llegar a ser sistémica y producir los efectos que observamos en forma de enfermedades autoinmunes.

En mala hora, tuvimos una discusión de la leche en la consulta, con la enfermera delante, con una agresividad acojonante por su parte y viniendo a decirme básicamente que ella tenía un título que le otorgaba la razón.


Para mi hoy en día es evidente que se más de inflamación, de asma y de psoriasis que la mayoría de médicos y especialistas. Pero paso de discutir con ellos, la mayoría no tienen el nivel ni el interés por aprender fuera de lo que aprendieron en los libros que se basan en teorías de los años 30 a 50.