Pues tu memoria te engaña. Yo, que tengo cincuenta y largos, me crié bajo un corredor aéreo muy concurrido. Lo que en otras palabras significa que me crié viendo contrails: largos cortos, persistentes, no persistentes, y de todo tipo.
Te estoy hablando de cuando era un crío, 1970.
Y nadie, nadie en absoluto, veía nada raro en todo eso: obviamente todo depende de las condiciones climáticas. Por ejemplo, es muy normal que en determinado día a cierta altura se produzcan y a cierta otra no, simplemente porque bastan 500 metros de diferencia de altura para que el aire tenga condiciones de humedad y temperatura muy distintas. Persistencias largas, cortas o que se difuminen o no lo hagan dependen de lo mismo: temperatura, humedad ambiente, vientos, etc.
En aquella época, las conspiranoias pasaban por otros temas completamente distintos: en lo que tenía que ver con los cielos, todas las cartas estaban puestas en los ovnis.
Pasa que hacia fin de siglo, el tema de los ovnis hacía aguas por todas partes, básicamente porque las principales pruebas que no fueran testimonios eran las fotografías: y con las nuevas tecnologías digitales al alcance de mucha gente, el fakear fotos o videos de ovnis ya no era cosa de unos pocos especialistas, sino que las podía hacer un montón de gente. Los medios se inundaron con miles de fakes de ovnis, y eso hizo que la magia de los E.T. se diluyera como chemtrail en día seco y cálido.
Era necesario, de manera urgentísima, encontrar un nuevo tema para magufear, porque mucha gente necesita la magufería como el aire para su estabilidad emocional.
Y de repente, plop, aparecieron los chemtrails. Éxito total.
Algo que había existido siempre pero que la gente no le prestaba la menor atención, se convirtió en un nuevo objeto de histeria. Los viejos observadores de aviones, como yo, que incluso a veces nos pasábamos tardes en las cabeceras de las pistas, no dábamos crédito a la tontería.
Pero así es la vida, queridos amiguitos: el universo es infinito y la tontería también.
Todo esto, aún así, no me impidió unirme a la MegaKonspiración y convertirme con los años en un agente experto y glamoroso.
Contesto preguntas.