Uritorco
The White Revolution is the only solution.
Estamos cansados de escuchar continuamente una serie de declaraciones convenientemente amplificadas por el aparato mediático del régimen, que muestran cómo el sistema oculta su cara y su verdadero rostro tras "enemigos" ficticios. El Sistema actual es especialista en confundir a los votantes y al pueblo en general con temas que salgan cada día en los diarios y TV, pero que no son vitales realmente, ocultando así los problemas graves y serios para el pueblo. Y lo peor es que los propios medios de la autodemoninada "disidencia" y "alternativa" suelen hacer lo mismo.
El presidente de la Generalitat catalana entre las peticiones esenciales al presidente Sánchez de Madrid estaba la de "acabar con el fascismo". Y al mismo tiempo los dirigentes de Podemos exigían oficialmente lo mismo, declarando que su esencia era el "anti-fascismo". Pero lo mismo hace VOX cuando públicamente condena el "nazismo" y acusa falsamente a la izquierda radical de ser el "nuevo fascismo". El PSOE, por su parte, declaraba fundamental y vital el tema del Valle de los Caídos y la Ley de Memoria Histérica (más que de Histórica).
Mientras, la derecha liberal y constitucional, con Ciudadanos, PP, Vox y el facherio nacional-casposo presentaba como el tema central, como el gran Satán, el enemigo, a los separatistas y el tema catalán. Un enemigo sin duda real, aunque no fundamental, que curiosamente ellos mismos han engendrando y fomentado a través del "consenso" político y el entregismo masónico. Como segundo diablo estaba, para esa derecha trumpista y fachosa, el Islam como enemigo, e Israel como amigo y aliado.
Hasta el más lerdo comprende que ni los separatistas catalanes (pese a su estupidez más absoluta y su posición mundialista y prosistema) ni los jovenlandeses pagapensiones, ni los fantasmagóricos fascistas (pocos y sin poder alguno) son los culpables de la situación de España y menos de Europa, del estado de nuestra sociedad, de la decadencia ética y jovenlandesal, de la deuda y la insoportable explotación laboral y financiera.
Y si los islamistas son objeto de todo tipo de ayudas y prebendas, si se les deja influir, no es por su fuerza sino por el apoyo absoluto de los políticos "nuestros" y de las instituciones "nuestras" que les dan todo lo que ni siquiera exigen, y la presión de la prensa y los medios financieros a favor de la globalización y la multi-culturalidad.
Así pues ni las derechas ni las izquierdas entienden cuál es el enemigo, y buscan solo "enemigos para el voto", ocultando en cambio a los verdaderos dueños del mundo y responsables de la situación.
Como en una obra de marionetas, solo ven las patéticas figuras de cartón de separatistas, fascistas o islamistas, en vez de ver las manos que manejan realmente el poder del mundo. Y el público aplaude el guiñol en vez de luchar contra los tiranos de verdad, trajeados y elegantes, que son fuertes y difíciles de atacar.
Pero ¿cuál es el primer enemigo? Seguramente alguno pensará que es esa finanza apátrida y usurera que domina por la deuda y la colonización económica, esa democracia que permite su dominio político, esos medios de información de masas tributarios del dinero, ese "lobby" judío que es la columna esencial y vertebral del poder financiero y mediático, esa marioneta armada hasta los dientes que es USA (con sus colaterales en Moscú y Pekin), dominada por los poderes económicos, ese liberal-progresismo poco equilibrado que promueve toda la sarama inmoral más extrema (desde el arte hasta las costumbres, pasando por la estética, la vestimenta, el lenguaje), etc.
Pues bien, esos son los enemigos reales sin duda, pero no el PRIMER enemigo.
El primer enemigo es el egoismo, el hedonismo, el individualismo y la cobardía de cada uno. Mientras la gente no logre salir de ese estado de querer todo y no sacrificar nada, de asumir derechos sin deberes, de evitar todo sacrificio para lograr algo positivo, de recluirse en su yo e ignorar la comunidad étnica y popular, de vivir como el Sistema indica, no hay nada a hacer.
Incluso mostrándoles (en realidad ya lo saben) el hecho de estar dominados por el dinero y las mafias financiero-empresariales que lo manejan, por partidos democráticos capitalistas, por medios de prensa y TV controlados por bancos y fondos de inversión, y por costumbres impuestas por el progresismo más da repelúsnte, no harán nada, seguirán votándolos, protestando en su casa, creyendo en las marionetas que les presentan como sus "enemigos", con tal de no tener problemas y "dejarse vivir".
Por supuesto, el segundo enemigo es el poder del dinero sobre la sociedad… y sus herramientas son la globalización, las multinacionales, los impuestos, los medios de información de masas, la deuda y la finanza, la degradación jovenlandesal impuesta a los pueblos por el progresismo financiado y apoyado por la prensa capitalista y los magnates de la finanza judía, la democracia que deja el voto masivo en manos de la propaganda de masas.
Sin reconocer al enemigo los grupos de extrema derecha (Muy de derechas y reaccionarios) y extrema izquierda (comunistas, okupas, anarcos, perroflautas, transgénero y drojatas diversos) son un desastre absoluto, que se dedican a atacarse mutuamente y a señalar a esas marionetas catalanistas, centralistas, pagapensiones, comunistas o fascistas para distracción de todos, y contento de los verdaderos dueños del poder.
Me imagino la risa que les debe dar a los magnates del poder cuando se pide prohibir a los fascistas o a los separatistas, en vez de pedir una revolución contra la banca y el poder financiero, contra la deuda y los impuestos, contra los mass media y la prensa capitalista y progresista.
www.burbuja.info
Mientras no se elimine y se erradique por completo la dictadura económica y el poder del dinero de nuestra sociedad todas las revoluciones solo son cambios irrelevantes en la cúpula del poder, y por lo tanto, abocadas al fracaso.
www.burbuja.info
@nuestralucha
El presidente de la Generalitat catalana entre las peticiones esenciales al presidente Sánchez de Madrid estaba la de "acabar con el fascismo". Y al mismo tiempo los dirigentes de Podemos exigían oficialmente lo mismo, declarando que su esencia era el "anti-fascismo". Pero lo mismo hace VOX cuando públicamente condena el "nazismo" y acusa falsamente a la izquierda radical de ser el "nuevo fascismo". El PSOE, por su parte, declaraba fundamental y vital el tema del Valle de los Caídos y la Ley de Memoria Histérica (más que de Histórica).
Mientras, la derecha liberal y constitucional, con Ciudadanos, PP, Vox y el facherio nacional-casposo presentaba como el tema central, como el gran Satán, el enemigo, a los separatistas y el tema catalán. Un enemigo sin duda real, aunque no fundamental, que curiosamente ellos mismos han engendrando y fomentado a través del "consenso" político y el entregismo masónico. Como segundo diablo estaba, para esa derecha trumpista y fachosa, el Islam como enemigo, e Israel como amigo y aliado.
Hasta el más lerdo comprende que ni los separatistas catalanes (pese a su estupidez más absoluta y su posición mundialista y prosistema) ni los jovenlandeses pagapensiones, ni los fantasmagóricos fascistas (pocos y sin poder alguno) son los culpables de la situación de España y menos de Europa, del estado de nuestra sociedad, de la decadencia ética y jovenlandesal, de la deuda y la insoportable explotación laboral y financiera.
Y si los islamistas son objeto de todo tipo de ayudas y prebendas, si se les deja influir, no es por su fuerza sino por el apoyo absoluto de los políticos "nuestros" y de las instituciones "nuestras" que les dan todo lo que ni siquiera exigen, y la presión de la prensa y los medios financieros a favor de la globalización y la multi-culturalidad.
Así pues ni las derechas ni las izquierdas entienden cuál es el enemigo, y buscan solo "enemigos para el voto", ocultando en cambio a los verdaderos dueños del mundo y responsables de la situación.
Como en una obra de marionetas, solo ven las patéticas figuras de cartón de separatistas, fascistas o islamistas, en vez de ver las manos que manejan realmente el poder del mundo. Y el público aplaude el guiñol en vez de luchar contra los tiranos de verdad, trajeados y elegantes, que son fuertes y difíciles de atacar.
Pero ¿cuál es el primer enemigo? Seguramente alguno pensará que es esa finanza apátrida y usurera que domina por la deuda y la colonización económica, esa democracia que permite su dominio político, esos medios de información de masas tributarios del dinero, ese "lobby" judío que es la columna esencial y vertebral del poder financiero y mediático, esa marioneta armada hasta los dientes que es USA (con sus colaterales en Moscú y Pekin), dominada por los poderes económicos, ese liberal-progresismo poco equilibrado que promueve toda la sarama inmoral más extrema (desde el arte hasta las costumbres, pasando por la estética, la vestimenta, el lenguaje), etc.
Pues bien, esos son los enemigos reales sin duda, pero no el PRIMER enemigo.
El primer enemigo es el egoismo, el hedonismo, el individualismo y la cobardía de cada uno. Mientras la gente no logre salir de ese estado de querer todo y no sacrificar nada, de asumir derechos sin deberes, de evitar todo sacrificio para lograr algo positivo, de recluirse en su yo e ignorar la comunidad étnica y popular, de vivir como el Sistema indica, no hay nada a hacer.
Incluso mostrándoles (en realidad ya lo saben) el hecho de estar dominados por el dinero y las mafias financiero-empresariales que lo manejan, por partidos democráticos capitalistas, por medios de prensa y TV controlados por bancos y fondos de inversión, y por costumbres impuestas por el progresismo más da repelúsnte, no harán nada, seguirán votándolos, protestando en su casa, creyendo en las marionetas que les presentan como sus "enemigos", con tal de no tener problemas y "dejarse vivir".
Por supuesto, el segundo enemigo es el poder del dinero sobre la sociedad… y sus herramientas son la globalización, las multinacionales, los impuestos, los medios de información de masas, la deuda y la finanza, la degradación jovenlandesal impuesta a los pueblos por el progresismo financiado y apoyado por la prensa capitalista y los magnates de la finanza judía, la democracia que deja el voto masivo en manos de la propaganda de masas.
Sin reconocer al enemigo los grupos de extrema derecha (Muy de derechas y reaccionarios) y extrema izquierda (comunistas, okupas, anarcos, perroflautas, transgénero y drojatas diversos) son un desastre absoluto, que se dedican a atacarse mutuamente y a señalar a esas marionetas catalanistas, centralistas, pagapensiones, comunistas o fascistas para distracción de todos, y contento de los verdaderos dueños del poder.
Me imagino la risa que les debe dar a los magnates del poder cuando se pide prohibir a los fascistas o a los separatistas, en vez de pedir una revolución contra la banca y el poder financiero, contra la deuda y los impuestos, contra los mass media y la prensa capitalista y progresista.
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