Cuidado, no solo se desconocen los efectos a largo plazo de la banderilla, es que tampoco se saben qué efectos a largo plazo van a tener aquellos que han pasado la enfermedad. Aquí los politicuchos se han lanzado a jugárselo todo al rojo o oscuro sin tener ni idea de con qué están jugando, es como la menestra se nadidad el otro día, que decide que la gente se ponga una tercera dosis, así, porque le ha dado un pálpito. Aquí quienes mejor lo han hecho son aquellos países que han esperado a ver que pasa para tomar una decisión mientras EEUU, RU, Israel, UE se peleaban unos con otros por ser los primeros en comprar las banderillas.