En las murallas de Tarragona existe una línea de base de "Piedras Ciclópeas", o sea, unos pedruscos enormes, tallados y colocados mucho antes de que llegaran los romanos.
Sobre esta base, los romanos construyeron a base de bloques, bastante grandes, pero manejables por un par de tíos, estos bloques son de caliza y se sacaron de algunas canteras cercanas.
Pero hay algunas partes de la muralla, hechos con piedras del terreno, y esta es la parte interesante, porque para los romanos era más fácil subir las piedras a la muralla, que transportarlas.
Que lo hacían, claro está, pero no eran bloques inmensos, y, si podían, se evitaban hacerlo.
Por medio de máquinas, subir los bloques era relativamente fácil, repito que, bloques manejables.
Y lo que queda patente, es que , siempre que pudieron, evitaron transportar las piedras, aprovechando todo lo que ya hubiera sobre el terreno,
el anfiteatro, por ejemplo se construyó de modo que la mitad la forma el mismo terreno
, sólo hubo que ajustar las filas de gradas al declive existente, otro tanto ocurrió en el teatro.
Y esta gente tenían la tecnología más desarrollada que existía.