La decisión judicial se produce en el marco del concurso de acreedores de Marme Inversiones, que a principios de 2008 compró el inmueble a la entidad por 1.900 millones de euros.
En el auto conocido hoy, el magistrado rechaza las alegaciones del Santander y defiende la solvencia de la propuesta de los Reuben, realizada a través de Sorlinda Investment, al entender que proporciona "garantías suficientes", como muestra el hecho de que ofrezcan una cantidad fija de 283,7 millones de euros, 51,5 millones más que la del banco que preside Ana Botín.