El alcalde de Bilbao coge una bicicleta por primera vez y ...

Lo peor del caso es que toda esa cuadrilla de fulastres con pañuelo amarillo al cuello y sonrisa que no les cabe en el rostro, y mira que lo tienen grande, está celebrando que se han gastado lo que no está en los escritos para traer a Bilbao el inicio del Tour de Francia.

Los nacionalistas que echaban espumarrajos por la boca cuando venía la vuelta ciclista a España al País Vasco, ahora están henchidos de gozo porque han traído la vuelta ciclista a Francia, país jacobino donde los haya, y en el que la posibilidad de que el País Vasco francés tenga un atisbo de la autonomía existente aquí ni está, ni se espera que llegue nunca.

Pero es que hay más, la vuelta ciclista a España estuvo terminando en el velódromo de Anoeta, y en general, en el País Vasco, durante muchísimos años, cuando la organizaba el Correo, y ETA atentó, y desde los partidos nacionalistas no pararon de presionar para que la vuelta no volviese al País Vasco. Cuando hace cinco o siete años volvió a Bilbao, desde el nacionalismo se le hizo el más absoluto vacío, y desde el Deia, la hoja parroquial nacionalista en Vizcaya, ni te digo.

Pues bien, ahora a celebrar con sonrisa beatífica y primera plana del Deia la llegada de los franceses.

Ojalá el talegazo fuera premonitorio, pero me temo que tienen muy bien pagada a la oleada turística afro-latinoamericana como para que se les escape el ayuntamiento de Bilbao.

Lo curioso es que cuanto mayor es el control que ejerce el PNV sobre el ayuntamiento de Bilbao, mayor es el número de bilbainos nativos que salen huyendo de la villa.
 
Lo peor del caso es que toda esa cuadrilla de fulastres con pañuelo amarillo al cuello y sonrisa que no les cabe en el rostro, y mira que lo tienen grande, está celebrando que se han gastado lo que no está en los escritos para traer a Bilbao el inicio del Tour de Francia.

Los nacionalistas que echaban espumarrajos por la boca cuando venía la vuelta ciclista a España al País Vasco, ahora están henchidos de gozo porque han traído la vuelta ciclista a Francia, país jacobino donde los haya, y en el que la posibilidad de que el País Vasco francés tenga un atisbo de la autonomía existente aquí ni está, ni se espera que llegue nunca.

Pero es que hay más, la vuelta ciclista a España estuvo terminando en el velódromo de Anoeta, y en general, en el País Vasco, durante muchísimos años, cuando la organizaba el Correo, y ETA atentó, y desde los partidos nacionalistas no pararon de presionar para que la vuelta no volviese al País Vasco. Cuando hace cinco o siete años volvió a Bilbao, desde el nacionalismo se le hizo el más absoluto vacío, y desde el Deia, la hoja parroquial nacionalista en Vizcaya, ni te digo.

Pues bien, ahora a celebrar con sonrisa beatífica y primera plana del Deia la llegada de los franceses.

Ojalá el talegazo fuera premonitorio, pero me temo que tienen muy bien pagada a la oleada turística afro-latinoamericana como para que se les escape el ayuntamiento de Bilbao.

Lo curioso es que cuanto mayor es el control que ejerce el PNV sobre el ayuntamiento de Bilbao, mayor es el número de bilbainos nativos que salen huyendo de la villa.

Bueno es que los nacionalismos separatistas españoles se fundamentan basicamente en eso. Un tremendo complejo de inferioridad y el repruebo a España. Pero luego los que los marginan y desprecian son el resto.

No digo nada nuevo u original, es más que obvio. Como esos patéticos intentos de la catalufada por promocionarse fuera del terruño y que el resto del mundo comprenda que ellos son como un suizo o un danés, que son los malvados españoles los que les obligan a retratarse como un país del tercer mundo.

Cualquier separata catalán o baskosuno pierde el ojo ciego por que los acepten o reconozcan fuera de España. Son lo más pelota y arrastrado de la piel de toro, y mira que está complicado en un país tan acomplejadito como es la propia España.
 
Estos otros usuarios de BILBAOBIZI le pueden dar algún cursillo.

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Pues mira que hay afición al ciclismo en el País Vasco, debe ser de los pocos vascos que no sabe montar bien en bici.

Como se suele decir, nos gobiernan los mejores...
 
Lo triste es que la alternativa al partido de lo negocios vasco ya sabéis cual es y encima no descarto que salgan, les están arañando votos a los recoge- nueces
 
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