¿Por qué hay que darle nada a nadie? Lo planteas como una falsa dicotomía, en la que hubiera que darle a uno o a otros. La falacia está en la propia base.
Un país próspero puede permitirse ayudar a sus ciudadanos de forma temporal. Cuando se quedan en el paro, o ahora que hay una circunstancia anómala. Lo que no puede NUNCA es sufragar vidas enteras de gente que tiene dos manos para trabajar y no está incapacitada.
En cuanto a las empresas, cuando abres la espita de dar dinero a personas, terminas abriendo el melón de darle dinero a empresas. Véase ONGs, asociaciones. Pero luego también subvenciones, que por supuesto terminan en manos de amigotes del que manda.
Cuando una empresa necesita dinero existe el sano mecanismo de atraer inversores, con el más sano mecanismo aún de que estos pongan su pasta a cambio de beneficios futuros. Al loro que en España ya se está hablando de que el estado entre a comprar acciones de empresas, lo último que nos faltaba por ver.