Lo de las redes sociales es de traca, no puedes salirte un ápice del guión sin arriesgate a que te denuncien en masa para bloquearte la cuenta.
He llegado a ver cientos de cuentas troll de Facebook (no exagero, creo recordar que eran más de doscientas, contadas por mí una a una) todas con el mismo nombre, la misma foto de perfil y casi todas sin ninguna publicación, como si alguien las tuviera en reserva para activarlas cuando le hicieran falta. Luego están los usuarios que actúan como auténticos pastores del rebaño, los comisarios políticos de guardia, vigilantes las 24 h. para denunciar cualquier comentario fashista, mashista o xenofago y la miríada de borregos zombis que se dedican a insultar, acosar e incluso a amenazar a los disidentes.
En fin, es increíble la importancia que le dan desde la izquierda a las RRSS y la cantidad de medios, de gente y de pasta que invierten en ello.
Desde luego la guerra de la comunicación la tienen ganada.