Yo tengo cientos de anécdotas con la policía, en otros países.
Pero de las últimas fue hace menos de un año, cruzando la frontera entre Ucrania y Rusia, (estando en guerra), por Jarkov (menudas jacas hay en Jarkov, por cierto...). Me paró la polícía ucraniana antes de llegar al control fronterizo, y me hizo un test de alcoholemia falso. Dí 0,24, me acordaré toda la vida
. Por supuesto no había bebido nada.
En fin, como ya tengo bastante experiencia en esto de las policías del tercer mundo, sobre todo en sudamérica y caribe, me empecé a descojonar en la cara de los policías por su test paco falso, en su propia oficina, y les dije, en ruso: Tenéis familia? Porque voy a llamar al Cónsul y váis a perder el trabajo. Debí resultar o loco, o convincente, porque tras una pausa, como en las pelis, me devolvieron el carnet de conducir, y ale, que tenga buen viaje.
Tengo muchas más anécdotas, pero no es cuestión de tochos en pleno junio.
Mis lugares favoritos del mundo para tener encuentros en la tercera fase con la Poli: Ucrania, Dominicana, Rusia , Bulgaria y Méjico.