España: Moussa, Senegales que hace que las cortesanas se corran
Publicado por leral.net el martes 19 de noviembre de 2019 a las 10:04 a.m. El | 0 comentario (s) |
Con su tez oscura, Moussa Fall no pasa desapercibido en las calles de las ciudades españolas que visita, un buen africano en su piel, que nunca deja de hacer el bien a las cortesanas sudamericanas y de Europa del Este. Llegada hace tres años desde jovenlandia, Moussa Fall se ha convertido en la favorita de las cortesanas de la Gran Vía de Madrid, después de que una de ellas hizo el ruido sobre sus actuaciones sensuales. En Moussa Fall, las cortesanas se lo dieron gratis y en casa.
Alojado en un centro de recepción de la Cruz Roja en la capital española, Moussa, que acaba de cruzar el Mediterráneo, está ansioso por vaciar sus calabazas con una blanca. Se le muestra la Gran Vía de Madrid. Y es con Mónica, una niña ucraniana, que se va por 25 euros.
Los 20 minutos acordados se hacen eternos a pedido de la cortesana, deslumbrados por la destreza de su cliente que quiere más. Satisfecha como siempre, tomó el número de teléfono del senegalés. Todas las noches, después de pasar el rato en las calles de la Gran Vía, Mónica invita a Moussa a su casa por partes de las piernas que se vuelven asiduas.
La ucraniana se lo cuenta a sus amigos que luchan por beneficiarse de las ventajas sensuales de los jovenlandeses. Moussa asegura cada vez, y el ruido corre entre las cortesanas. Aconsejado por sus compatriotas, Moussa se enfrenta a la oportunidad de su vida y utiliza bien sus actuaciones sensuales para ganar dinero. Es Maria, una transexual brasileña que hará de Moussa un verdadero Gigolo profesional después de probar su destreza.
A partir de ahora, los senegaleses viajan por toda España con la única misión de hacer que las cortesanas disfruten con dinero en efectivo. Moussa Fall, el ilegal, desde entonces dejó el centro de recepción para buscar un apartamento en las afueras de Madrid, desde donde administra silenciosamente su nuevo negocio sensual.
kebanacamera
Espagne: Moussa, le sénégalais qui fait jouir les prostituées
Publicado por leral.net el martes 19 de noviembre de 2019 a las 10:04 a.m. El | 0 comentario (s) |
Con su tez oscura, Moussa Fall no pasa desapercibido en las calles de las ciudades españolas que visita, un buen africano en su piel, que nunca deja de hacer el bien a las cortesanas sudamericanas y de Europa del Este. Llegada hace tres años desde jovenlandia, Moussa Fall se ha convertido en la favorita de las cortesanas de la Gran Vía de Madrid, después de que una de ellas hizo el ruido sobre sus actuaciones sensuales. En Moussa Fall, las cortesanas se lo dieron gratis y en casa.
Alojado en un centro de recepción de la Cruz Roja en la capital española, Moussa, que acaba de cruzar el Mediterráneo, está ansioso por vaciar sus calabazas con una blanca. Se le muestra la Gran Vía de Madrid. Y es con Mónica, una niña ucraniana, que se va por 25 euros.
Los 20 minutos acordados se hacen eternos a pedido de la cortesana, deslumbrados por la destreza de su cliente que quiere más. Satisfecha como siempre, tomó el número de teléfono del senegalés. Todas las noches, después de pasar el rato en las calles de la Gran Vía, Mónica invita a Moussa a su casa por partes de las piernas que se vuelven asiduas.
La ucraniana se lo cuenta a sus amigos que luchan por beneficiarse de las ventajas sensuales de los jovenlandeses. Moussa asegura cada vez, y el ruido corre entre las cortesanas. Aconsejado por sus compatriotas, Moussa se enfrenta a la oportunidad de su vida y utiliza bien sus actuaciones sensuales para ganar dinero. Es Maria, una transexual brasileña que hará de Moussa un verdadero Gigolo profesional después de probar su destreza.
A partir de ahora, los senegaleses viajan por toda España con la única misión de hacer que las cortesanas disfruten con dinero en efectivo. Moussa Fall, el ilegal, desde entonces dejó el centro de recepción para buscar un apartamento en las afueras de Madrid, desde donde administra silenciosamente su nuevo negocio sensual.
kebanacamera
Espagne: Moussa, le sénégalais qui fait jouir les prostituées
