Suele ser la respuesta a la autoevaluación de la vida hasta ese momento. Expectativas, planes e ilusiones frente a hitos conseguidos y hechos objetivos. Te preguntas qué has hecho con tu vida y la respuesta normalmente es la de haber remado como un cabrón para llevar una vida mediocre. Ves que el tiempo pasa volando y que no te queda juventud para disfrutar de esas cosas que siempre habías soñado hacer. Si te esperas mucho, serás un viejo y la salud empezará a fallar. Es ley de vida. Así pues, valoras mucho más tu tiempo y toleras menos las gilipoll.eces. Eres más directo, políticamente incorrecto, valoras las cosas sencillas, y te la su.da todo más.
Unos se divorcian de su charo paticorta, otros se compran una moto o un barco, otros cambian de trabajo...