parlatroit
Madmaxista
La visita de la embajadora de jovenlandia a Parla, el islamizado paraíso de los pagapensiones y uno de los dominios marroquíes en Europa, ha servido para que el Ayuntamiento de Parla (PSOE+Potemos) se jacte de que Parla es el icono de la multiculturalidad.
Todo una declaración de claudicación y sumisión a cargo de la misma gente socialista que hace una década saqueó y arruinó Parla y permitió y alentó la invasión okupa de Parla.
Parla es una anomalía urbana de cifras negativamente estremecedoras, una ciudad salpicada por barrios-gueto desoladora, triste, caotica y sin futuro, solo hay que visitarla para comprobarlo.
Un insólito lugar saqueado y arruinado, con unas deudas ya impagables, con los mayores índices de pobreza de España y de los de menor renta per cápita entre los Ayuntamientos de más de 50.000 habitantes.
Los despilfarros sistemáticos a lo largo de décadas y la corrupción han destrozado Parla. La multiculturización, lumpenización y las sucesivas y masivas invasiones okupas han hecho el resto.
Más de 23.000 personas se encuentran por debajo del umbral de la pobreza, y de ellas más de 5.000 están en pobreza severa, muchas de ellas niños y niñas. Más de 2.000 familias parleñas necesitan ayuda alimentaria.
Mientras la delincuencia okupa disfruta de suministros gratis en sus viviendas usurpadas y robadas, miles de familias parleñas no pueden de luz, y gas, este invierno, al no poder afrontar los pagos de estos bienes básicos. Muchas familias no pueden pagar el precio del comedor escolar de sus hijos ni de los libros y material escolar. Parece la realidad de un lugar fuera de Europa, pero se trata de Parla.
La llegada masiva de okupas y mafias vinculados a la delincuencia y a la marginalidad a Parla desde hace seis años y su progresivo asentamiento con total impunidad, ha dinamitado cualquier atisbo de convivencia en las calles de Parla y ha supuesto la puntilla definitiva para una ciudad que agoniza, deprimida y deprimente.