JuanJoseRuiz
Madmaxista
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El fondo Blackstone, el mayor casero España, ha puesto en venta los activos residenciales en alquiler que posee en nuestro país, según fuentes conocedoras de la situación. La decisión llega en medio de un fuerte aumento de los impagos de los inquilinos, que ya alcanzan el 10% y teme que alcancen el 20%. Pero no va a ser fácil completar estas ventas ante la incertidumbre por la evolución del cobi19, que hace que los potenciales compradores prefieran esperar, salvo que los precios sean muy bajos.
Blackstone posee unas 55.000 vivienda en alquiler en nuestro país, según distintos medios, comprados en su mayor parte a entidades financieras (adquirió al Santander los activos inmobiliario del Popular y los de la antigua Catalunya Caixa, entre otros) y procedentes de la adquisición de Testa. Es decir, se trata de muchos activos y muy heterogéneos, que no podrá vender de golpe sino poco a poco.
Pero ya ha empezado el proceso. Según las fuentes citadas, ha contratado a varios brokers inmobiliarios, entre los que se encuentra SH Walters. Y la semana pasada, una de las socimi cotizadas en las que Blackstone reparte estos activos, Albirana, anunció una junta general extraordinaria para la «toma de conocimiento y, en lo menester, aprobación de la aportación y/o transmisión, directa o indirecta, de determinados activos en el marco de una operación de reestructuración». Esta socimi agrupa básicamente los activos adquiridos al FROB procedentes de la antigua CatalunyaCaixa.
Hay que tener en cuenta que las socimi no pueden vender sus activos antes de tres años para beneficiarse de la exención del Impuesto de Sociedades de que disfrutan estos vehículos. En consecuencia, Blackstone empezará a colocar las viviendas que lleven ya ese período en la cartera de sus vehículos.
Incremento de los impagos
Según algunas de las fuentes consultadas, la razón por la que Blackstone no quiere mantener su altísimo nivel de inversión en nuestro país es el incremento de los impagos de los alquileres que se está registrando con motivo de la crisis del el bichito, que ya llegan al 10% y que el fondo teme que superen el 20% en vista de la negativa evolución de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo en España. Ante este panorama, cree que ya no va a poder obtener aquí las rentabilidades que exige a su cartera.
Otras fuentes, en cambio, desvinculan el inicio de las ventas de activos del incremento de los impagos. Sostienen que el 10% no es para tanto y que Blackstone ha adoptado moratorias y otras medidas para aplazar los alquileres. Según estas fuentes, el motivo es el fin del plazo de los tres años de las socimi, que permite explorar las posibilidades de venta en función de la localización de los inmuebles.
Pero precisamente la adopción de moratorias es uno de los motivos que los expertos en el sector señalan para pronosticar un incremento mayor de los impagos: muchos de los inquilinos que han pedido un aplazamiento no serán capaces de hacer frente a los pagos cuando finalice ese período ni de abonar las cantidades aplazadas.
Dificultades para encontrar comprador
Blackstone no lo va a tener fácil para desprenderse de todos estos inmuebles, precisamente por la elevada incertidumbre sobre la evolución de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo en nuestro país. «Como estos fondos invierten siempre muy apalancados [con mucha deuda], necesitan vender a un precio mínimo para poder devolver el principal y los intereses, o tienen pérdidas», explica una de las fuentes.
Y no parece que vaya a haber muchos inversores interesados en adquirir viviendas en alquiler con este panorama, salvo que sea a precios muy bajos que Blackstone no puede permitirse. Otra cosa son carteras concretas en alguna ciudad que sí pueden encontrar inversores locales interesados.
Blackstone posee unas 55.000 vivienda en alquiler en nuestro país, según distintos medios, comprados en su mayor parte a entidades financieras (adquirió al Santander los activos inmobiliario del Popular y los de la antigua Catalunya Caixa, entre otros) y procedentes de la adquisición de Testa. Es decir, se trata de muchos activos y muy heterogéneos, que no podrá vender de golpe sino poco a poco.
Pero ya ha empezado el proceso. Según las fuentes citadas, ha contratado a varios brokers inmobiliarios, entre los que se encuentra SH Walters. Y la semana pasada, una de las socimi cotizadas en las que Blackstone reparte estos activos, Albirana, anunció una junta general extraordinaria para la «toma de conocimiento y, en lo menester, aprobación de la aportación y/o transmisión, directa o indirecta, de determinados activos en el marco de una operación de reestructuración». Esta socimi agrupa básicamente los activos adquiridos al FROB procedentes de la antigua CatalunyaCaixa.
Hay que tener en cuenta que las socimi no pueden vender sus activos antes de tres años para beneficiarse de la exención del Impuesto de Sociedades de que disfrutan estos vehículos. En consecuencia, Blackstone empezará a colocar las viviendas que lleven ya ese período en la cartera de sus vehículos.
Incremento de los impagos
Según algunas de las fuentes consultadas, la razón por la que Blackstone no quiere mantener su altísimo nivel de inversión en nuestro país es el incremento de los impagos de los alquileres que se está registrando con motivo de la crisis del el bichito, que ya llegan al 10% y que el fondo teme que superen el 20% en vista de la negativa evolución de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo en España. Ante este panorama, cree que ya no va a poder obtener aquí las rentabilidades que exige a su cartera.
Otras fuentes, en cambio, desvinculan el inicio de las ventas de activos del incremento de los impagos. Sostienen que el 10% no es para tanto y que Blackstone ha adoptado moratorias y otras medidas para aplazar los alquileres. Según estas fuentes, el motivo es el fin del plazo de los tres años de las socimi, que permite explorar las posibilidades de venta en función de la localización de los inmuebles.
Pero precisamente la adopción de moratorias es uno de los motivos que los expertos en el sector señalan para pronosticar un incremento mayor de los impagos: muchos de los inquilinos que han pedido un aplazamiento no serán capaces de hacer frente a los pagos cuando finalice ese período ni de abonar las cantidades aplazadas.
Dificultades para encontrar comprador
Blackstone no lo va a tener fácil para desprenderse de todos estos inmuebles, precisamente por la elevada incertidumbre sobre la evolución de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo en nuestro país. «Como estos fondos invierten siempre muy apalancados [con mucha deuda], necesitan vender a un precio mínimo para poder devolver el principal y los intereses, o tienen pérdidas», explica una de las fuentes.
Y no parece que vaya a haber muchos inversores interesados en adquirir viviendas en alquiler con este panorama, salvo que sea a precios muy bajos que Blackstone no puede permitirse. Otra cosa son carteras concretas en alguna ciudad que sí pueden encontrar inversores locales interesados.
