No me explicaba el porqué los iraníes y otros siguen fabricando una ametralladora pesada soviética de los años 30: la DShK de 12,75 x 108 mm. Mientras los medios occidentales siguen publicitando como una maravilla la Browning Cal. 50 M2 (o de 12,7x 99 mm). La cuestión eran los precios: mientras la DShK cuesta unos 2.200 dólares, la Browning M2 cuesta sus 14.000 dólares; una brutal diferencia.
Ya pueden imaginarse los precios que imponen los fabricantes de armas occidentales a sus productos, un gran negocio.