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He puesto las cifras sin basarme en ninguna evidencia estadística. De la misma manera, tú has hecho lo mismo al decir que 230.000 personas sufriendo gravísimos padecimientos y torturas sin descanso en España son demasiadas. Solo mira los índices de trastornos de ansiedad graves y depresiones mayores crónicas y verás que rondarán ese 5%. Lo que pasa es que esa gente es invisible. No la ves en la calle. Yo no dispongo de datos, repito. Pero me sorprendería muchísimo que no haya un 5% de la población viviendo en auténticos infiernos. Otra cosa es el ejemplo concreto que he puesto de las torturas. Eso es un porcentaje muchísimo menor al 1%, sin duda.Aquí cometes una falacia numérica para justificar el antinatalismo. Los extremos de la distribución son demasiado grandes. No hay un 10% de la población que viva una vida paradisiaca ni un 5% que sufra inconcedibles horrores. Un 5% de toda la población española son 230.000 personas sufriendo gravísimos padecimientos y torturas sin descanso. Demasiadas.
En este tema del antinatalismo las proporciones son importantes. El ser humano es egoista no solo individualmente sino colectivamente. Lo vemos en la configuración del Estado. Si el 5% de la población puede ser abusada y esquilmada para que el 51% viva un 0,1% mejor, se hará sin miramientos ni mala conciencia.
La realidad será que un 70-80 tendrá una vida agridulce, sin grandes disfrutes pero sin excesivos padecimientos. O lo opuesto: una vida de intensos momentos felices y grandes sufrimientos; pues a menudo van de la mano en intensidad.
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