Nadie dice que los objetivistas seáis "objetinazis", lo único que dice el forero es que es incorrecto llamar a las feministas "feminista radicals".
En eso tienes razón. nancy viene de "nacionalsocialismo". Su ideología es un socialismo de corte nacionalista-supremacista. Como la nación alemana se constituye sobre principios étnicos -eres alemán si eres hijo de alemanes-, termina siendo socialismo supremacista étnico.
Actualmente, existen en España partidos que son socialistas, y además nacionalistas. Son perfectamente democráticos y legales, aunque algunos de ellos han tenido organizaciones terroristas detrás que siguen vivas -aunque hagan paripés de entregas de armas-, o ya están "desactivadas" -como la que le pegó un tiro en la rodilla a ese periodista tan querido por la izquierda, y lo dejaron atado en un árbol para que se desangrara, teniendo delante atada a una compañera para que lo viera morir desangrado-. Es la cariñosa sutileza del marxismo cuando se mete en la cama con el nacionalismo; sea étnico, lingüístico o sociológico.
Técnicamente hablando, el sesso no es una raza. Todos los hombres derivan genéticamente en un 50% de hombres y en un 50% de mujeres. Todas las mujeres derivan genéticamente en un 50% de hombres y en un 50% de mujeres. El supremacismo femenino, por lo tanto, solo es comprensible desde una mezcla de décadas de manipulación cultural dirigida por el marxismo cultural, con unos objetivos de ingeniería social muy claros; una pérdida de los valores que nos han permitido acceder a los derechos, libertades y bienestar al que hemos accedido en los países europeos; y una situación de privilegio de la mayoría de votantes sobre la minoría -las mujeres, tienen vidas más largas, luego siempre hay más mujeres votantes que hombres votantes-.
La situación no va a revertir. El gran problema de la ingeniería social en general y del marxismo cultural en particular es que no ha leído a Hayek, y por razones ideológicas no va a aceptar la teoría de la imposibilidad del socialismo -la práctica totalidad de los progres ni la han leído, y los pocos que la han leído no la entienden-. Personalmente creo que el marxismo cultural ya ha ganado. La próxima generación, la de nuestros hijos, "disfrutará" las ventajas del marxismo cultural en todo su esplendor. Y nuestros nietos, de llegar a vivir, podrán optar por convertirse al Islam, o terminar como los Coptos en Egipto -para el que no lo sepa, los descendientes de los que construyeron las pirámides son los coptos, no los egipcios. Una mirada sin las lentes prejuzgadoras del marxismo cultural en su día a día nos dará una idea del futuro que les espera a nuestros nietos como dhimmī en la Unión de Repúblicas Socialistas Islámicas Europeas-.
La casta extractiva parasitaria ya huirá a la Patagonia, a EEUU, a Venezuela, o a cualquier otro destino. La movida no va con ellos. Sino con los que leéis esto.
