La iglesia católica de 2024 está infiltradísima.
Hoy en día escuchas al Papa yendo en contra de las operaciones de los trans, y la gente se sorprende de que apoye cosas que deberían ser obvias.
Y A PONER LA x EN LA DECLARACION PARA QUE SIGAN CEBANDO jovenlandeses !!
La iglesia ha sido infiltrada por el enemigo, como ha ocurrido ya en muchas otras ocasiones.
Apoyar la oleada turística forzosa y el genocidio autóctono no es de Dios.
Se puede pedir que se ayude al necesitado, pero no ser cómplice de las mafias de la inmi gración ilegal.
La casilla de ayuda a la iglesia ya si eso que se la pongan esos nuevos españoles que yo no.
No pinten con brocha tan subida de peso, por favor. La aportación de la Iglesia católica a Cáritas a través de la declaración de IRPF se sitúa alrededor del 2% del presupuesto de la ONG. De 350 millones de presupuesto en 2018, 95 procedían del dinero público.
La Iglesia utiliza la labor de la ONG como escaparate, pero la aportación directa vía equis católica supone menos del 2% del dinero de Cáritas
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Cáritas da la impresión de ser un escaparate de la Iglesia cuyo control se les ha ido de las manos. Lo lógico cuando el dinero público entra, vamos. Y luego están las aportaciones privadas (donaciones, suscripciones, cuestaciones, etc) que son otra de las fuentes más importantes de financiación. Cáritas tiene tal peso por los recursos que maneja que da la impresión que es la ONG la que da órdenes a la Iglesia y no al revés.
En cuanto a la Conferencia Episcopal, es un organismo con un equilibrio muy precario y unas luchas de poder tremendas. De manera que casi todo lo que difunden va siempre con una cal y otra de arena, porque es todo resultado de acuerdos entre partes (muy) enfrentadas. Hay que templar demasiadas gaitas.
En el último pleno se eligió a monseñor Argüello como presidente de la CEE, un conservador que no está de acuerdo con los desvaríos de los últimos años. A cambio, el Papa Francisco logró colarle como vicepresidente al arzobispo de Madrid, monseñor Cobo, para controlarle.
Vamos a ver qué personajes hay en la archidiócesis de Madrid:
Laura Moreno es
argentina de nacimiento y esta es la razón de esta sobredosis en la archidiócesis.
Laura Moreno tiene un amigo en Roma que la llama por teléfono y con el que habla de los asuntos de Madrid y de España. Esto ya lo sabía y lo ha sufrido en sus propias carnes el cardenal emérito Osoro, que por eso la nombró para congraciarse con el amigo romano de la teresiana. Lo que pasa que al bueno de Osoro le salió rana al final cuando la teresiana se pasó al bando de Cobo y comenzó a hacer campaña por el obispo auxiliar en las conversaciones con su amigo de Roma.
Que quién es el amigo romano, ustedes mismos deduzcan, alguien que viste de blanco.
La cardenala es delegada de juventud de la archidiócesis de Madrid, directora del Departamento de Información y Comunicación Institución Teresiana, Directora Residencia de Opositoras y posgraduadas León XII y miembro del Consejo de redacción Revista Crítica. Como cobre por todos esos trabajos, apunta un miembro de la Comunidad, se van a forrar las Teresianas.
En una entrevista a Laura Moreno cuando le preguntaron por la mujer en la Iglesia contestó que “las mujeres formamos parte de la Iglesia, si entendemos a la Iglesia en la categoría que tanto usa el papa Francisco, que es pueblo de Dios, seguidoras de Jesucristo. Me parece que el lapsus o falta de consideración de aquellos que se dedicaban a la logística en el Concilio Vaticano II nos sirve de metáfora, porque creo que la mitad, o más de la mitad de la Iglesia que somos las mujeres, continuamos ausentes en algunos espacios, sobre todo en los de reflexión, discernimiento y decisión. Me parece que la mirada y la perspectiva femenina todavía permanece ausente en algunos espacios y es un error. El cambio de paradigma que inició Juan XXIII, continuó Pablo VI, y que el papa Francisco está intentando hacer avanzar, todavía permanece limitado en algunos sectores de la Iglesia como institución”.
No lo dirá por ella ni por lo que manda en la diócesis de Madrid. Si hasta los curas la llaman la cardenala y comentan que es una de las personas que más le están soplando al todopoderoso cardenal Cobo.
Recuerden que en una entrevista para Trece dijo aquello que “la agenda 2030 es la agenda de los jóvenes cristianos” y que hubo “una gran intuición en don Carlos en este aspecto, y que el sínodo de los jóvenes celebrado en octubre «confirmó esta propuesta”. Dice que precisamente ese sínodo “es nuestra carta programática”, y que dicho sínodo “viene a decir que la Iglesia tiene que vivir una profunda renovación”.
Está todo dicho.
Ahora veamos lo que dice monseñor Argüello, el presidente de la CEE:
¿Quién en la política española ha tenido narices de hablar de reemplazo y sustitución? No piensen en la Iglesia como algo monolítico, uniforme, porque no lo es. Y atacarla en bloque, sin distinciones, es dejar solos precisamente a los que quieren acabar con el caos y el lamentable estado actual de cosas. Distingan un poco.
Por cierto, si alguien quiere leer el comunicado íntegro de monseñor Argüello, tiene muchas más cosas interesantes:
Y de propina: