Yo no he vivido aquella época, pero mi padre si, y efectivamente, le fue de perlas sin tener estudios. Mi padrino, por ejemplo, no sabía leer ni escribir, lo cual no fue impedimento para obtener un trabajo, hacer una casa, casarse y tener varios hijos. El trabajo era más duro, pero era abundante, había pocos impuestos en comparación con lo que pagamos hoy, la jubilación se alcanzaba con muchos menos años de cotización. Mi padre de hecho, se prejubiló con cincuenta y tantos años. inmi gración prácticamente inexistente, en mi aldea no se vio un neցro, un Latinoamericano o un asiático hasta quizá los años 90 o los 2000. Literal.