Yo no disfruto de nada.
Simplemente cada acto tiene su efecto.
Y como llevo avisando a todo el que me conoce desde el pasado marzo, los aplausos, los arcoíris, los resistiré, los pasteles caseros y demás platanodas de esos meses se van a pagar muy caros.
Si en vez de hacer esas insensateces, los que teníais vuestro empleo en riesgo hubierais salido a liarla, otro gallo os cantaría.
Ahora, asumid las consecuencias de vuestros actos.
Y lo peor es que no aprendéis porque aun no he visto a ningún parado, a ningún afectado por un ERTE ni a ningún sector arruinado por esta farsa (turismo, hostelería, taxistas, etc...) quemar las calles.
Ahí seguís avocados a la miseria, ruina y hambre con vuestro cubreboca bien puesto callados como pilinguis, como ganado que va directo al matadero.
Así que no tengo otra cosa que deciros que jorobaROS, COBARDES.