Está a hora mismo Almeida en Usera, en un puestecito escuchando a la gente. Hay también varias ambulancias del Samur. He pasado justo cuando un hombre se ha puesto a gritarle que es una vergüenza que no esté todo Madrid con las mismas restricciones y no por barrios.
Y ahora una noticia sobre China. Y luego nos preguntamos cómo es que están saliendo y no haya segundas olas. Y es que 10 meses despues (¡DIEZ!) de sus primeros casos, si quieres ir al país, debes pagarte tu una cuarentena en la ciudad donde aterrices. Y otra cuarentena extra si cambias de provincia.
Da igual quien seas. Hasta Cruyff se la ha comida.
Un cordobés encerrado 14 días en un hotel para entrar en China: «Aquí viven en el año 2530»
De la noticia:
Le obligan a pagarse todo, dos pruebbas PCR en la ultima semana, notificar a diario por un canal de wechat la temperatura, etc...
"Alejandro Vázquez es profesor de español en la Universidad de
Shenzhen desde hace tres años, más otros dos en Xian, donde ahora afronta la cuarentena encerrado en un hotel. Llegó a China desde Córdoba el pasado día 15 entre
grandes medidas de seguridad. Nadie se escapa del encierro en un alojamiento, obligatorio «para todos», asegura en conversación con ABC desde su habitación. Hasta
Cruyff, entrenador de un equipo de fútbol en Shenzen, tuvo que confinarse antes de retomar su trabajo. Son medidas «estrictas pero necesarias», como las califica este joven cordobés, para poder «acabar con el bichito». Además, «me ha llamado la atención lo bien organizado que está», declara.
Para poder regresar a su trabajo en la universidad, Alejandro tuvo que
realizarse dos pruebas PCR antes de partir para China -la última como máximo tres días antes de partir-, y obtener un permiso sellado de la embajada en España. Al llegar a Xian fue trasladado a un hotel para guardar
dos semanas de encierro, que debe costear de su propio bolsillo. En total, han sido casi 3.000 euros de gastos entre el vuelo (1.700 euros), hotel con pensión completa (unos 800 euros al cambio) y los análisis (150 euros cada uno).
El profesor no puede salir de su habitación de hotel en ningún caso. Puede, eso sí,
encargar determinados productos a un supermercado (nada de comida) que le entregan los empleados del hotel. Además, tiene que tomarse la temperatura dos veces al día y comunicarlo por
WeChat (una aplicación parecida al Whatsapp)."