Los funcionarios que conozco ya están pensando que dada la pinta que está tomando el asunto y si el incremento de casos sigue a este ritmo lo mejor sería una vuelta al confinamiento. Ahora bien, si les propones que durante ese confinamiento deberían de ver reducidos sus ingresos hasta la vuelta a la normalidad para no causar más daño a la ya de por sí delicada salud económica del país, te mirarán con mala cara y te responderán que de eso nada, que hay dinero de sobra para pagarles aunque no realicen actividad alguna.