Me he dado cuenta que en un hilo que trata sobre el petrodolar, he dado por supuesto que todo el mundo sabe lo que es y por ello he omtido explicarlo, a continuación pongo información sobre el petrodolar y sobre el sistema al que sustituyó, el patrón oro.
El Patrón Oro es un sistema de tipo de cambio que determina el valor de una unidad monetaria a partir de una cantidad fija de oro. De esta manera, quien emite la divisa asegura a su receptor su cambio por la cantidad de oro estipulada.
Durante el siglo XIX, con el ascenso del comercio internacional, se puso de manifiesto la necesidad de aumentar la cantidad de dinero en circulación así como los medios de pago. Por esta razón, la moneda acuñada pasó a usar como referencia patrones metálicos (oro, plata y en algunos casos bronce o cobre). De entre todos estos patrones, destaca dos: el bimetálico (oro y plata) y el monometálico (solo oro o solo plata).
El monometalismo del oro se impuso y alcanzó su “época dorada” en el período 1871-1914
Desde 1870, el Patrón Oro se convirtió en el principal referente en gran parte de las economías occidentales (de Reino Unido dio el salto al mundo).Lo más reseñable no era la convertibilidad en oro de la moneda a un tipo de cambio fijo, sino el inicio de la construcción de un Sistema Monetario Internacional.
La convertibilidad en oro era fijada a una paridad fija por el Banco Central de cada país, a diferencia del sistema monetario actual, en el que las divisas cotizan libremente en los mercados financieros dentro de unas bandas de fluctuación.
El Patrón Oro utilizaba dos mecanismos de ajuste principales:
Arbitraje: que constituía una herramienta cortoplacista.
Políticas monetarias: utilizadas para ajustes a largo plazo.
Uno de los principales inconvenientes del Patrón Oro es que actúa como transmisor de las crisis económicas a nivel global, su principal ventaja, la estabilidad en el ratio de intercambio.
En julio de 1944 en la localidad de Bretton Woods, ubicada en New Hamphsire (Estados Unidos), se pone fin al período proteccionista de 1914 a 1945 (Guerras mundiales y período de entreguerras) y se sientan las bases del nuevo Sistema Monetario Internacional, que tiene dos protagonistas, el dólar y el oro.
Asimismo, se establece una convertibilidad de la divisa americana (el dólar) con el oro y del resto de divisas con el dólar. Dos años después de esta reunión se crearon el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.
En 1971, el presidente de Estados Unidos, R.Nixon, anunció el abandono definitivo del Patrón Oro.
Las reservas de oro estadounidenses se habían reducido dramáticamente durante la Guerra de Vietnam y la Guerra Fría y la convertibilidad en oro del dólar había resultado una tarea casi imposible. Tras estas incidencias, nacía así un nuevo Sistema Monetario Internacional que llega hasta nuestros días.
Como ya sabemos, en la actualidad las divisas fluctúan libremente en los mercados financieros internacionales bajo la supervisión de los Bancos Centrales. Aunque por tradición y símbolo de fortaleza de la divisa norteamericana, es costumbre expresar los pares de divisas respecto al dólar.
De 1871 a 1971, el oro tuvo un gran protagonismo en el Sistema Monetario Internacional, que finalmente cedió al sistema de divisas actual.
Ahora sabemos, por qué el dinero que llevamos en el bolsillo, no vale nada a menos que otra persona confíe en que vale algo.
Del Patrón Oro al hundimiento del SMI de Bretton Woods | Blog #PorTuInterés
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(OroyFinanzas.com) – Entender el funcionamiento del sistema monetario y económico mundial en los últimos 40 años no es posible sin estudiar el desarrollo e implementación del sistema petrodólar. En una serie de tres artículos exploraremos ¿de dónde viene y cómo funciona el sistema del petrodólar?, los retos del sistema del petrodólar y posibles alternativas si se colapsa el petrodólar.
¿De dónde viene y cómo funciona el sistema petrodólar?
Después de la Segunda Guerra Mundial se creó un sistema internacional mediante el cual los dólares se convirtieron en moneda de reserva del mundo. Se acordó que cada dólar fuera respaldado por una cantidad fija de oro. El acuerdo era que cualquier país que tuviera dólares, siempre tenía la opción de canjearlos por oro físico. La idea era crear una mayor confianza y estabilidad en el comercio internacional, lo que se logró durante cerca de veinte años. Este acuerdo puso a los Estados Unidos en una posición particularmente ventajosa; no muy diferente a un banco comercial que opera un sistema de reserva fraccionaria.
Valéry Giscard d’Estaing se refirió a este sistema como a un “privilegio exorbitante”, allá por la década de 1960 y Charles de Gaulle en febrero 1965 dio un famoso discurso titulado La crisis del dólar en la misma línea.
¿Qué es lo que era? Si bien se entiende que Estados Unidos tenía que “poner los dólares a disposición del mercado” para que la cosa funcionase, nadie previó los aumentos masivos en la impresión de dinero y de los gastos que serían necesarios para financiar, entre otras muchas cosas, la guerra de Vietnam.
A finales de 1960 se hizo bastante evidente que el volumen de dólares circulando en todo el mundo era muy superior a la cantidad de oro disponible en las bóvedas de seguridad de EE.UU.
Lo que siguió después de una serie de sustos financieros y de crisis financieras fue un pánico bancario (bank run en inglés) contra las reservas de oro de EE.UU. liderado por los franceses. La salida de las reservas de oro desde Fort Knox alcanzó proporciones tan alarmantes que Richard Nixon se vio obligado a poner fin a la convertibilidad del dólar con el oro físico, el 15 de agosto de 1971. Lo cual se anunció como una medida temporal.
Pero como dijo Milton Friedman: “Nada es tan permanente como un programa gubernamental temporal.” Y así fue. El dólar, ya no respaldado por nada, se convirtió en una moneda fíat y muy pronto el dólar empezó a devaluarse frente a otras monedas.
La OPEP continuó vendiendo petróleo por dólares norteamericanos, pero luego vio que estaba perdiendo dinero y comenzó a considerar el uso de otras monedas, valorando incluso el oro como opción.
Hacía falta urgentemente una nueva idea para restaurar el dólar a su posición anterior que fue propuesta por Henry Kissinger.
La historia cuenta que en 1973 Nixon envió en una misión secreta a Arabia Saudita a Kissinger para una serie de conversaciones secretas de alto nivel. Un año más tarde se llegó a un acuerdo como nos recuerda Ron Paul: “Sorprendentemente, un nuevo sistema fue ideado que permitió a los Estados Unidos operar las máquinas de impresión de la moneda de reserva mundial sin restricciones, ¡sin ni siquiera una pretensión de convertibilidad del dólar a oro! Esto le dio al dólar un lugar especial entre las monedas del mundo y, en esencia, el dólar se convirtió en una moneda respaldada por petróleo.”
Marin Katusa escribe lo siguiente en un artículo:
“En 1975, todos los miembros de la OPEP acordaron vender su petróleo sólo en dólares estadounidenses. Cada nación importadora de petróleo en el mundo comenzó a ahorrar sus excedentes en dólares estadounidenses con el fin de poder comprar petróleo; con la alta demanda de dólares se fortaleció la moneda. Además de eso, muchos países exportadores de petróleo como Arabia Saudita pasaron a invertir sus excedentes de dólares en bonos del Tesoro americano, con esto Estados Unidos consiguió una fuente profunda y permanente para financiar sus gastos. El sistema del petrodólar [ya que llegó a ser llamado así] fue un movimiento político y económico brillante. Obligó al dinero del petróleo del mundo a fluir a través de la Reserva Federal de Estados Unidos, creando cada vez una mayor demanda internacional, tanto en dólares como de deuda pública de los Estados Unidos, mientras que en esencia Estados Unidos obtiene el petróleo del mundo prácticamente de forma gratuita, ya que el valor del petróleo está denominado en una moneda que los Estados Unidos controla e imprime. El sistema del petrodólar se extiende más allá del petróleo, la mayor parte del comercio internacional se realiza en dólares estadounidenses.”
En pocas palabras, si los países querían comprar casi cualquier cosa de otros países, no sólo petróleo, necesitaban tener dólares. Ya sea ganando los dólares o saliendo a pedirlos prestados. El poder y los privilegios que este sistema confiere a los Estados Unidos no se cedió fácilmente.
¿Por qué los líderes de la OPEP llegaron a este acuerdo con EE.UU para crear el petrodólar?
Había dos razones principales. La primera tiene que ver con la naturaleza de los cárteles. La única forma para que el cartel pudiera funcionar a largo plazo era asegurar que los miembros individuales no hicieran trampa, con una moneda única rastreable para el comercio internacional del petróleo se aseguraba la viabilidad del cartel.
La segunda razón es que Estados Unidos prometió protección a los líderes de la OPEP contra invasiones extranjeras o levantamientos nacionales. El sistema se mantuvo en lugar, sin oposición, durante los siguientes veinticinco años. A lo largo de este período, las increíbles riquezas de las ventas de petróleo continuaron fluyendo, casi exclusivamente, a las élites de los países miembros de la OPEP, y poco ha cambiado en este aspecto. Uno puede imaginar el resentimiento, la frustración y la ira que siente la gente común en Oriente Medio, cuando compara su situación y su falta de desarrollo con países como la India y China en el mismo período. Su repruebo enconado, no sólo por sus gobernantes, pero por cada administración americana sucesiva que mantuvo gobernantes serviles a esos intereses en el poder.
En nuestro primer artículo explicamos el origen del sistema del petrodólar. En esta segunda parte repasamos los ataques que ha habido al sistema del petrodólar y cómo EE.UU y sus aliados se enfrentaron a estos retos. En el año 2000, el primer gran reto para el sistema del petrodólar fue lanzado por Saddam Hussein.
¿Cuándo y por qué empezó a ir mal? Vamos a leerlo con las palabras de Marin Katusa:
“Hasta noviembre del año 2000, ningún país de la OPEP se había atrevido a violar la regla de fijación de precios en dólares para el petróleo, y mientras que el dólar seguía siendo la moneda más fuerte del mundo también había pocas razones para cuestionar el sistema. Pero a finales del año 2000, Francia y algunos otros miembros de la Unión Europea convencieron a Saddam Hussein para desafiar el sistema de petrodólares y comenzara a vender el petróleo de Irak a cambio de alimentos en euros, no en dólares.”
Esto no fue sólo la primera revuelta directa contra el sistema del petrodólar, sino también algo que comenzó a ser una bola de nieve: “En el tiempo entre entonces y la invasión estadounidense de Irak en marzo del 2003, varias otras naciones insinuaron su interés en que el comercio del petróleo no fuera en dólares, incluyendo a Rusia, Irán, Indonesia, e incluso Venezuela.”
La invasión de Irak fue justificada por la supuesta posesión de Saddam de armas de destrucción masiva.
Como todos sabemos ahora, esto era un montaje. En realidad, se suponía que la invasión era lograr dos cosas. En primer lugar deshacer cualquier daño al sistema del petrodólar; y segundo, actuar como un elemento disuasorio para otros que tratarán de romper con el sistema del petrodólar. Ambos objetivos no se lograron.
Muammar Gadafi de Libia reta el sistema del petrodólar
“El sistema sería directamente desafiado por segunda vez, esta vez por parte de Libia. En febrero de 2009, Muammar Gadafi, fue elegido presidente de la Unión Africana y quería continuar el esfuerzo de crear los Estados Unidos de África que, entre otras cosas, incluiría una moneda unificada, un dinar basado en el oro. Gaddafi fue tan lejos como para sugerir que el comercio de petróleo entre las naciones africanas se cambiara del dólar a esta nueva moneda de oro.”
Este desafío era mucho más peligroso que el primero. Al igual que con Saddam hubo una respuesta, pero esta vez fue mucho más rápido, y mucho más brutal. La excusa para la intervención fue otra mentira, es decir, razones “humanitarias”.
El tercer desafío en realidad comenzó en el 2003, cuando Irán anunció su intención de abandonar el sistema del petrodólar, y ha sido constante desde entonces.
“A principios de 2008, Irán lanzó un nueva bolsa de intercambio de mercancías conocida como la Iranian Oil Bourse. La intención era permitir comerciar petróleo iraní a un precio y negociarlo con múltiples monedas. Irán anunció que estaría listo el 20 de marzo de 2012. Ésta fue una declaración de guerra contra el petrodólar.”
En respuesta a los planes de Irán para romper el sistema del petrodólar se preparó esta respuesta de EE.UU. y la UE
“Justo antes del lanzamiento de la bolsa de intercambio de Irán, el 17 de marzo, la Unión Europea dió la orden de ampliar las sanciones contra Irán mediante la eliminación de los bancos iraníes en el sistema internacional de transferencia bancaria conocido como SWIFT. Por otra parte, ningún banco podía hacer negocios con Irán y sería sancionado. Parecía que el motor del comercio internacional de Irán se había detenido y su industria petrolera aplastado.”
Sin embargo algunos países dependen del petróleo de Irán:
“Japón, China, India y Turquía están entre los países que han sido dependientes del petróleo iraní, en algún grado. Varias discusiones han tenido lugar entre Irán y sus socios comerciales sobre la posibilidad de hacer trueque de otros productos básicos, como el oro o el grano.”
La razón dada para las sanciones eran las ambiciones nucleares de Irán. Sea como fuere, la historia de las sanciones pudo afectar al principio, pero en realidad nunca se llevó a cabo como estaba previsto en todo caso. Además, no hay dudas de que muchos otros países se animaron también a encontrar diferentes maneras de pagar por su petróleo.
El auge de los acuerdos bilaterales de swaps de divisas (currency swap agreements)
Lo que nos lleva a otra cosa que ha estado ocurriendo cada vez más en los últimos diez años más o menos: el crecimiento de los acuerdos bilaterales de swaps de divisas, sobre todo en los cuatro últimos años. No sólo es un método más rápido y más barato de hacer las cosas, sino también una manera de salir del dominio de Estados Unidos en el comercio internacional y todo lo demás que tenga que ver con el dólar, y esta tendencia no va a cambiar. La única cosa que mantiene a la economía estadounidense es la deuda. Lo único que atrae a los prestamistas es la fortaleza del dólar. La única razón para la fortaleza del dólar es el sistema del petrodólar. Esto va a cambiar cuando cambie la demanda del petróleo en dólares, el gobierno no va a recibir el dinero suficiente para pagar todas sus facturas, y los tipos de interés comenzarán a subir y luego todo tipo de cosas horribles pueden pasar. Que el dólar se derrumbe es inevitable. Pero ¿qué significará para el resto del mundo?
Marin Katusa, en una nota optimista, no considera que su desaparición sea un desastre. “2012 podría terminar siendo el año en que el mundo empezó a desertar el dólar estadounidense como moneda global de reserva de su elección. Imagine el resto del mundo que poco a poco, empieza a hacer negocios en sus propias monedas e invertir cada vez menos de sus excedentes en bonos del Tesoro estadounidense. Constituye nada menos que una aniquilación lenta pero segura del dólar. Esto no tiene que ser algo malo para los Estados Unidos. Las deudas gigantescas del país nunca pueden ser pagadas, mientras el dólar mantenga algo cerca de su valoración actual. Considerando el estado del país lo único que lo sostiene es su estatus de moneda de reserva global. Si esto cambia, tal vez los Estados Unidos sean capaces de reembolsar sus deudas y comenzar de nuevo. Aquel nuevo principio vendría sin los privilegios y subvenciones inculcadas a las cuales los americanos están tan acostumbrados, pero es asombroso que el sistema del petrodólar haya durado tanto tiempo.
Sin embargo, si esto no es lo que sucede, y el colapso del dólar es repentino, entonces el futuro es sombrío. Para comprender el qué y el por qué, tenemos que dar unos pasos atrás en el tiempo; a algo que sucedió en la década del 80, el 22 de septiembre de 1985 para ser exactos, en el Hotel Plaza de Nueva York.
En nuestros dos primeros artículos explicamos el origen del sistema del petrodólar y los retos que ha habido al petrodólar hasta la actualidad. En este tercer y último capítulo exploramos las alternativas que tiene la economía mundial si fuera a colapsar el sistema del petrodólar.
En la primera mitad de la década de 1980, el dólar se apreció hasta el punto de que los exportadores estadounidenses estaban pasándolo muy mal. Las fuerzas impulsoras detrás del dólar excesivamente fuertes eran el propio sistema del petrodólar y los altos tipos de interés. A través de una campaña concertada de protestas y lobbying, los exportadores, finalmente, estimularon a la Casa Blanca a hacer algo. Los ministros de Finanzas de las economías líderes mundiales, se reunieron en el Hotel Plaza de la ciudad de Nueva York en septiembre de 1985. Llegaron a un acuerdo: actuar de forma concertada para provocar una caída controlada del valor del dólar.
Esto se haría mediante la intervención activa en los mercados de divisas de todo el mundo. El acuerdo se conoce como el Plaza Accord. Durante los próximos dos años las cosas no salieron exactamente como estaba previsto, pero lograron su objetivo principal, una significativa devaluación del dólar frente a sus principales competidores extranjeros. El punto crucial es que este acuerdo no se hizo en secreto, no se hizo a puerta cerrada. Sus intenciones fueron anunciadas con antelación y lo llevaron a cabo de manera ordenada y de tal manera que no hubiera un pánico financiero en los mercados mundiales. Sin embargo, este método particular de devaluación sólo era posible para el dólar, simplemente debido a su posición única como moneda de reserva del mundo. No es así para otros países y sus monedas.
El dólar se sostiene por el petrodólar
El sistema del petrodólar está empezando a desmoronarse. Los Estados Unidos están en quiebra y ha sido así durante mucho tiempo. La única razón por la que los extranjeros continúan prestando, es debido al sistema del petrodólar. Pero cuanto más este sistema se debilite, mayor es la presión y más baja el dólar y cuanto más cerca, los Estados Unidos estarán de la crisis tardía de deuda soberana. Tal crisis ocurre cuando un gobierno no puede pagar sus deudas a los prestamistas extranjeros. Para hacer frente a la situación, los gobiernos tienen algunas opciones, pero casi siempre optan por el impago. Esto significa que los prestamistas generalmente no conseguirán todo su dinero, en algunos casos no consiguen nada. Además, si los gobiernos eligen la opción del impago, los acreedores no pueden recurrir a la ley. Deberán asumir cualquier pérdida. ¿De qué forma se toma la opción por impago?, depende de las circunstancias y de los acuerdos vigentes, si los hubiera, que se alcanzan. Por ejemplo, un país podría optar por rechazar toda o parte de la deuda. Alternativamente, pueden optar por reestructurar sus deudas de alguna manera a través de la devaluación, la alteración de los términos y condiciones, o alguna combinación de los mismos.
El número de países que se han encontrado en esta situación en los últimos cien años es bastante asombrosa. Los campeones son los países que componen el Centro y Sur de América. Se puede decir que estos países no han desaparecido, todavía están con nosotros, pero todos tuvieron que enfrentar las consecuencias de esos impagos. No menos importante el paso inmediato a la recesión que siguió y el hecho de que los inversores siempre se lo van a pensar dos veces antes de prestar dinero de nuevo a ese país. Sin embargo, el hecho es que de una forma u otra, estos países siguieron ese camino.
Estados Unidos sigue siendo de lejos la economía más poderosa del planeta. También es el mayor consumidor mundial. Para decirlo sin rodeos, si la economía estadounidense colapsa todas las demás se verán afectadas. El incumplimiento por parte de los Estados Unidos no es una opción, no está en el interés económico de nadie que suceda eso. Por tanto, la tendencia a la baja en el dólar debe gestionarse de tal manera que asegure que no haya un colapso repentino. Lo que nos lleva de vuelta al Plaza Accord.
¿Se puede hacer de nuevo? De acuerdo, que fue hace mucho tiempo. Y sí, las razones son muy diferentes esta vez para frenar la caída del dólar, y no puede llevarse a cabo. Además, han pasado muchas cosas desde entonces hasta ahora, por lo que muchas cosas han cambiado mucho, no menos importante el ascenso económico de China. Pero, ¿qué otra opción hay? Primero. Si fuera posible gestionar de nuevo una caída controlada en el dólar, ¿sería esto suficiente para evitar el desastre? No por sí mismo, es una condición necesaria pero no suficiente. Otras cosas tienen que estar pasando al mismo tiempo, que trabajen juntos para reducir el tamaño total de la deuda, a un nivel que sea al menos manejable.
En segundo lugar. Si el sistema del petrodólar colapsa y el papel moneda del dólar como moneda de reserva se erosiona, ¿que surgirá para reemplazarlo?
Los acuerdos bilaterales de swaps de divisas (currency swap agreements) como solución a corto
A corto y mediano plazo, los acuerdos bilaterales de swaps de divisas pueden convertirse en algo un poco más ambicioso, tal vez parecido a una idea sugerida por Lord Keynes en Bretton Woods, el Bancor y tal vez, por un tiempo, variaciones sobre éste que operará en una base regional. ¿O quién sabe si un sistema basado en el oro?
Chris Lancy
Fuente: American Daily Herald
¿De dónde viene y cómo funciona el sistema petrodólar? (1)
Retos al sistema del petrodólar (2)
Soluciones al colapso del sistema del petrodólar (3)