La Xunta quiere cesar a miles de interinos sin indemnizarles
Por la puerta de atrás. Con nocturnidad y alevosía. Así es como la Xunta pretende cesar a miles de empleados públicos con vínculo laboral temporal sin indemnizarles. El instrumento normativo que empleará la Xunta para ejecutar esta medida será la Ley de Medidas Fiscales, Administrativas y de Ordenación, la cual actúa como ley de acompañamiento a los Presupuestos de Galicia. Fue publicada el 9 de febrero.
Dicha ley contempla primero la transformación en puestos de trabajo de naturaleza funcionarial de las vacantes desempeñadas por personal laboral temporal.
En segundo lugar, establece que la administración expedirá un nombramiento de naturaleza funcionarial interina al personal laboral temporal que ocupe puestos previstos como de naturaleza funcionarial en las relaciones de puestos de trabajo. Este nombramiento requerirá la aceptación por el interesado y supondrá la novación de la relación existente con la administración, sin solución de continuidad en la prestación de los servicios, y la transformación de aquella en un vínculo de naturaleza funcionarial interina.
En tercer lugar, en el caso de que la relación de puestos de trabajo prevea la amortización del puesto, en los casos en los que el personal interesado no aceptase el nombramiento interino o este no fuese procedente, la Administración efectuará los trámites legales para extinguir la relación laboral.
Por último, los puestos de trabajo que pasen a ser desempeñados por personal funcionario interino quedarán sujetos a su convocatoria en los concursos de traslados y a la selección de funcionarios de la Xunta.
Dentro del colectivo del personal laboral, formado por cientos de miles de empleados públicos en toda España, un alto porcentaje están contratados temporalmente y, una gran mayoría, en fraude, (concatenación irregular de contratos, temporalidad sin causa, cesiones ilegales de mano de obra, o interinidades con duración superior a la legal). Este abuso sistemático en la contratación del personal laboral temporal es un cáncer que afecta a las administraciones y, también, a la Xunta.
Ni la normativa ni la jurisprudencia establecen ningún tipo de indemnización en el caso del cese de un funcionario interino. Por el contrario, el Estatuto de los Trabajadores y la jurisprudencia sí que establecen derecho a la indemnización para el caso del cese del personal laboral temporal o del personal laboral con contrato de interinidad. La protección de los empleados públicos temporales con vínculo laboral se ha incrementando recientemente tras las sentencias del Tribunal de Justicia de la UE, de ahí este cambio normativo que ahora ejecuta la administración gallega.
¿Que es lo que pretende la Xunta con esta ley de acompañamiento? Cesar a miles de empleados públicos temporales sin abonarles indemnización alguna, pero también, impedirles ser indemnizados en el futuro pese a estar contratados antes de forma fraudulenta.
La disposición transitoria que la Xunta intenta poner en marcha establece que transformará miles de plazas de personal laboral en plazas de funcionario. Ante este cambio en la naturaleza de la plaza, los empleados públicos temporales con contrato laboral que las ocupan solo tendrán dos opciones, o aceptar que su contrato de trabajo temporal se transforme en un nombramiento como funcionario interino, o bien su cese.
Seamos claros. La Xunta pretende chantajear, (no hay otra expresión que pueda definirlo), a los empleados públicos más vulnerables y precarios, que son los trabajadores temporales. Pretende obligarles a escoger entre pan para hoy (aceptar el cambio de nombramiento y mantener el vínculo unos meses) o hambre para mañana (ser cesados en el primer concurso de traslados de personal funcionario sin derecho a ningún tipo de indemnización).
Por la puerta de atrás. Con nocturnidad y alevosía. Así es como la Xunta pretende cesar a miles de empleados públicos con vínculo laboral temporal sin indemnizarles. El instrumento normativo que empleará la Xunta para ejecutar esta medida será la Ley de Medidas Fiscales, Administrativas y de Ordenación, la cual actúa como ley de acompañamiento a los Presupuestos de Galicia. Fue publicada el 9 de febrero.
Dicha ley contempla primero la transformación en puestos de trabajo de naturaleza funcionarial de las vacantes desempeñadas por personal laboral temporal.
En segundo lugar, establece que la administración expedirá un nombramiento de naturaleza funcionarial interina al personal laboral temporal que ocupe puestos previstos como de naturaleza funcionarial en las relaciones de puestos de trabajo. Este nombramiento requerirá la aceptación por el interesado y supondrá la novación de la relación existente con la administración, sin solución de continuidad en la prestación de los servicios, y la transformación de aquella en un vínculo de naturaleza funcionarial interina.
En tercer lugar, en el caso de que la relación de puestos de trabajo prevea la amortización del puesto, en los casos en los que el personal interesado no aceptase el nombramiento interino o este no fuese procedente, la Administración efectuará los trámites legales para extinguir la relación laboral.
Por último, los puestos de trabajo que pasen a ser desempeñados por personal funcionario interino quedarán sujetos a su convocatoria en los concursos de traslados y a la selección de funcionarios de la Xunta.
Dentro del colectivo del personal laboral, formado por cientos de miles de empleados públicos en toda España, un alto porcentaje están contratados temporalmente y, una gran mayoría, en fraude, (concatenación irregular de contratos, temporalidad sin causa, cesiones ilegales de mano de obra, o interinidades con duración superior a la legal). Este abuso sistemático en la contratación del personal laboral temporal es un cáncer que afecta a las administraciones y, también, a la Xunta.
Ni la normativa ni la jurisprudencia establecen ningún tipo de indemnización en el caso del cese de un funcionario interino. Por el contrario, el Estatuto de los Trabajadores y la jurisprudencia sí que establecen derecho a la indemnización para el caso del cese del personal laboral temporal o del personal laboral con contrato de interinidad. La protección de los empleados públicos temporales con vínculo laboral se ha incrementando recientemente tras las sentencias del Tribunal de Justicia de la UE, de ahí este cambio normativo que ahora ejecuta la administración gallega.
¿Que es lo que pretende la Xunta con esta ley de acompañamiento? Cesar a miles de empleados públicos temporales sin abonarles indemnización alguna, pero también, impedirles ser indemnizados en el futuro pese a estar contratados antes de forma fraudulenta.
La disposición transitoria que la Xunta intenta poner en marcha establece que transformará miles de plazas de personal laboral en plazas de funcionario. Ante este cambio en la naturaleza de la plaza, los empleados públicos temporales con contrato laboral que las ocupan solo tendrán dos opciones, o aceptar que su contrato de trabajo temporal se transforme en un nombramiento como funcionario interino, o bien su cese.
Seamos claros. La Xunta pretende chantajear, (no hay otra expresión que pueda definirlo), a los empleados públicos más vulnerables y precarios, que son los trabajadores temporales. Pretende obligarles a escoger entre pan para hoy (aceptar el cambio de nombramiento y mantener el vínculo unos meses) o hambre para mañana (ser cesados en el primer concurso de traslados de personal funcionario sin derecho a ningún tipo de indemnización).
