pffffff.... pero mira que algunos burbujistas sois "wishfulthinkadores" y - por extensión - catastrofistas.
Qué narices tendrán que ver los churros con las medinas. O el tocino con la velocidad, para los más castizos.
Todos sabéis perfectamente que los mercados (la bolsa) va por una senda que poco o nada tiene que ver con el españolito de a pie.
Una cosa es una 'espantá' de unos inversores que, eventualmente, deciden que sus 10 millones de euros ya no le rentan en ladrillo, y los mueve a otro sitio.
Y otra cosa muy distinta, es que eso nos vaya a proporcionar, a vosotros y a mí, viviendas al 60% de su precio actual.
A ver si resulta que ignoramos la bolsa para lo que no nos conviene o interesa (digamos, el 95% de las ocasiones) y nos agarramos a ella para "ver" lo que deseamos que ocurra.
De hecho, me sorprende esta tardanza. Las inmobiliarias que cotizan deberían haberse desplomado hace ya meses, no hoy o mañana. Unos señores que disponen de millones de euros libres para invertir aquí o allá, deberían tener suficiente asesoramiento para saber que nunca hay que esperar a ganar el último dolar (más concretamente, hay que dejar que lo gane otro). No entiendo cómo el desplome bursátil de las inmobiliarias no se ha producido, por ejemplo, poco antes de la entrada del nuevo CTE (preludio clarísimo del frenazo inmobiliario por el claro incremento de costes), o por citar otro ejemplo, ante los primeros síntomas del endurecimiento de las condiciones para la concesión de hipotecas (claro síntoma del agotamiento de este mercado).
Supongo que el mercado ha aguantado hasta "el último dolar" (i.e., hasta el último momento) por el motivo de siempre, esto es, la avaricia desmedida.
A los que reverenciáis el apocalipsis, quisiera llamar vuestra atención sobre los paralelismos de lo que véis hoy en la bolsa, con lo que ocurrió en la burbuja tecnológica del 2000.
En efecto, los mercados bursátiles ( nótese la definición de "mercado bursátil": AL 90% LOS QUE ENTRARON PARA ESPECULAR Y GANAR ) se llevaron un ostión de pares de narices, pero, mis queridos amigos, eso no signigicó la DESTRUCCIÓN DEL MERCADO TECNOLÓGICO, o el aborrecimiento de internet, o la percepción de que todo lo relacionado con la tecnología es un fiasco financiero.... me temo que nada de eso ocurrió.
Lo que ocurrió fue que un mercado rentable y necesario (tecnología), fue sobrevalorado y especulado por los señores que nada entienden de él, pero sí entienden mucho de rentabilidades (señores brokers). El resultado fue una severa corrección para esos señores, pero el mercado tecnológico en sí siguió existiendo al margen de esos señores, y hoy goza de excelente salud.
En mi humilde opinión, estos últimos años tenemos más de lo mismo. Un mercado rentable y necesario (inmobiliario) ha sido sobrevalorado y especulado por los mismos señores que no saben cual es el tanto por cien de arcilla que lleva un ladrillo común, pero que siguen entendiendo mucho de rentabilidades (señores brokers... "cuánto" tiempo sin verles! ).
Ahora asistimos a un nuevo ostión corrector para dichos señores... y la historia se repite. Y como se repite, que nadie piense que porque la cotización en bolsa de las inmobiliarias se vaya al carajo (si finalmente lo hace), Pepito Pérez de los Palotes Mil (esto es, yo o vosotros), va a poder comprarse un piso casi por la mitad de lo que cuestan hoy.
Se habla, en ocasiones, con la alegría que proporciona la ignorancia...
l'pililastrê