dkd
Madmaxista
España es un país que se cree rico. Y como se cree rico actua como tal. Los españolitos se han acostumbrado a un nivel de vida y no se dan cuenta que están viviendo muy por encima de sus posibilidades. Este espejismo se está manteniendo en el tiempo gracias al dinero prestado que las entidades de crédito están repartiendo, a diestro y siniestro, y gracias a la energía barata que nos llega todos los días, sin falta, desde fuera de nuestras fronteras. Ya que el dinero no es como la energía, el milagro de traer riqueza futura al ahora ha sido posible. Pero pocos se plantean si esa riqueza futura es riqueza real o no lo es. En el caso de que esa supuesta riqueza futura no se materialize España estará condenada a un devastador colapso. En ese caso, los españoles estarían gastando en el presente lo que nunca van a tener en el futuro. Muchos aprenderán entonces la sutil diferencia que hay entre la riqueza real en el presente y la riqueza futura respaldada solo por la confianza en que dicha riqueza podrá ser realizada.
Los españoles son el adaliz de la confianza en el futuro. Todo lo ven de color de rosa mientras el tamaño de su optimismo solo rivaliza con el tamaño de su inconsciencia. La confianza, y la deuda asociada, se han convertido en el motor de España. El crédito, obtenido hipotecando sus ingresos futuros, es el fuel que alimenta la maquinaria trasnochada de la economía española. La confianza en un futuro de abundancia y la inconsciencia colectiva llevarán a España a un irremediable colapso. ¿Dónde están las gentes cautas y responsables?. Aquellas que comprendían que significa "Pan para hoy, hambre para mañana". Eso es lo que tendrá España, hambre para mañana y deuda para mañana y pasado mañana.
El año que viene recesión. Comienza la debacle.
Los españoles son el adaliz de la confianza en el futuro. Todo lo ven de color de rosa mientras el tamaño de su optimismo solo rivaliza con el tamaño de su inconsciencia. La confianza, y la deuda asociada, se han convertido en el motor de España. El crédito, obtenido hipotecando sus ingresos futuros, es el fuel que alimenta la maquinaria trasnochada de la economía española. La confianza en un futuro de abundancia y la inconsciencia colectiva llevarán a España a un irremediable colapso. ¿Dónde están las gentes cautas y responsables?. Aquellas que comprendían que significa "Pan para hoy, hambre para mañana". Eso es lo que tendrá España, hambre para mañana y deuda para mañana y pasado mañana.
El año que viene recesión. Comienza la debacle.