Ahí está el meollo del asunto, mientras algo no aparezca en los medios de comunicación corporativos, los políticos pueden fingir que no exista aunque les esté reventando en las narices.
Como saber sí, lo sabemos todos, pero sólo "extraoficialmente".
El rey es un cliente y todos lo sabemos, pero los medios de comunicación siguen hablando de él como si fuese un modelo de virtudes.
El régimen posfranquista es una república bananera, semejante a la I Restauración, donde el poder se lo reparten entre cuatro y los jueces están a lo que les manden. Pero los periódicos hablan con todo respeto del "estado de derecho" y de la democracia española.
Lo de la Gripe A fue un escándalo y una tomadura de pelo colosal, multibillonaria, pero nadie ha ido a la guandoca.
La crisis financiera del 2007 fue una gigantesca chapuza causada por la falta de regulación y de control del casino financiero, y salimos de ella rescatando a los peores chorizos del sistema con dinero del contribuyente. Los altos ejecutivos de Wall Street tenían gente en las instituciones públicas, así que todo quedaba en casa. Fue un saqueo en toda regla del que salimos peor que entramos, el casino sigue y el sector financiero sigue sin vigilancia ni freno. Pero nadie asume responsabilidades.
La Guerra de Irak fue un engaño orquestado por la Casa Blanca para provocar una guerra ilegal con miles de muertos, destrucción y contratas multimillonarias de "reconstrucción". Pero no pasa nada.
La diferencia entre la "versión oficial" y lo que sabemos de sobra es tan enorme que los periodistas deben de tener un libro aparte para recordar todas las mentiras. Digo yo.
En fin, lo importante de esta entrevista es que el tipo les obliga a enfrentarse a la mentira.