Hoy hacen un análisis en Libertad Digital más o menos en la misma línea, más pulido por aquello de haber tenido dos días para pensarlo.
El déficit público del primer semestre avanza que España incumplirá con Bruselas - Libre Mercado
El incentivo para reducir el déficit tomando medidas de recorte es muy escaso en época electoral, así que si el Gobierno prevé que, por ejemplo, acabaremos en un déficit del 4,4% no va a recortar esos 2.000 millones de euros adicionales.
Aunque sea por motivos puramente numérico-políticos. Pasar del 4,4% al 4,2% ya prácticamente da igual en términos periodísticos (siempre habrá alguien que diga, "es que venimos del 11%").
Sin embargo, en el corto plazo esos recortes se trasladan casi automáticamente al PIB. Y lo que son "apenas dos decimillas de PIB" anual resulta que son 4 décimas del PIB semestral y 8 décimas del PIB trimestral.
Teniendo en cuenta que el crecimiento para los últimos dos trimestres del año ya se prevé inferior al de los dos primeros (hoy hemos sabido un PMI industrial que marca mínimos de crecimiento en dos años), un recorte más o menos notorio del gasto público (por ejemplo, inversión) dejaría el crecimiento prácticamente planchado.
Yo creo que se esperará a que estos dos factores sigan haciendo su labor
-se paga menos por intereses según se sustituye deuda antigua por deuda nueva
-a los parados se les acaba la prestación
mientras el aumento de la recaudación (comparado con 2014) seguirá existiendo
Además, el dato de déficit de 2015 no se sabe hasta finales de Marzo de 2016. Si entonces resulta que es el 4,4% en vez del 4,2% siempre cabrá el recurso de pensar en términos del "Gobierno anterior" (incluso aunque sigan los mismos, es fácil que sea en coalición y no con mayoría absoluta).