Esta semana he tenido la oportunidad de charlar con un nuncabajista convencido, alguien que cree que la mejor forma de invertir y sobretodo de aumentar su patrimonio es comprar, las revalorizaciones futuras era su lema y el tirar el dinero con el alquiler, su primer mandamiento.
Fue un hueso duro de roer, no aportaba datos, pero sí, una convicción sostenida en las tendencias de los ultimos años, que la vivienda siempre sube.
Después de la charla, algo se notaba distinto en su discurso. Del nuncabajismo, pasó al mesetismo y las subidas ipecianas.
Además, uno de sus baluartes mayores, era el de seguir invirtiendo en vivienda, para sostener el precio (y subidas, claro). Defendía que la mayoría de transacciones las realizan pasapiseros, invirtiendo y haciendo que no bajen.
Otro punto, era el de construir sin límite, para conseguir bajar el precio, el mito de que a mayor oferta, se conseguiría bajar el precio. Algo que hemos comprobado, no ha funcionado. Y simplemente por todos aquellos que han jugado con el derecho de todos, mediante la inversión en vivienda.
En definitiva, y con ello concluyo. Situábamos el principal cáncer del precio de la vivienda en los inversionistas. Y que una de las maneras mejores, para esta regularización es la desaparición de estas hienas del mercado urbanístico.
saludos