El Real Madrid y el Farsa tienen el mismo modelo en Champions, los dos intentan superarse y hacer cada año “el más difícil todavía”. Pero con una diferencia fundamental : el Real hace “el más difícil” para ganar y el Farsa para palmar.
Al Farsa un año la Roma le remonta y le mete 3. Otro año se supera y el Liverpool le remonta y le enchufa 4. Otro año llega el Bayern y le mete 8.
¿Cómo podría superarse y empeorarlo este año? Pues recibiendo la goleada en su propio campo, que le meta un gol un exjugador, que la nueva estrella del Madrid le meta dos y que el entrenador rival sea su exentrenador.
Por el contrario, el Madrid un día te remonta una eliminatoria ( con mal resultado en la ida) en el partido de vuelta. En otras ocasiones, te remonta en la prórroga. Incluso otro día mete dos goles en el último minuto para empatar una eliminatoria y ganar en la prórroga
Y este año ¿Cómo podría superarse? Pues remontando, pero en los penaltis. Es decir, que falle primero el especialista Lukita y luego se remonta. Y que los penaltis los tiren defensas ( suplentes el pasado año o este) como Lucas Vázquez, Nacho o Rudiger.
Por tanto, Madrid y Farsa en Champions juegan a lo mismo, a superar lo del año pasado por inverosímil que parezca, pero con la diferencia que el Farsa lo hace para ir aumentando el ridículo y el Real para ir agrandando su leyenda.
Esta es la diferencia entre un equipo de perdedores y tramposos como el Farsa y el club más grande de toda la historia del fútbol, el Real Madrid.
Al Farsa un año la Roma le remonta y le mete 3. Otro año se supera y el Liverpool le remonta y le enchufa 4. Otro año llega el Bayern y le mete 8.
¿Cómo podría superarse y empeorarlo este año? Pues recibiendo la goleada en su propio campo, que le meta un gol un exjugador, que la nueva estrella del Madrid le meta dos y que el entrenador rival sea su exentrenador.
Por el contrario, el Madrid un día te remonta una eliminatoria ( con mal resultado en la ida) en el partido de vuelta. En otras ocasiones, te remonta en la prórroga. Incluso otro día mete dos goles en el último minuto para empatar una eliminatoria y ganar en la prórroga
Y este año ¿Cómo podría superarse? Pues remontando, pero en los penaltis. Es decir, que falle primero el especialista Lukita y luego se remonta. Y que los penaltis los tiren defensas ( suplentes el pasado año o este) como Lucas Vázquez, Nacho o Rudiger.
Por tanto, Madrid y Farsa en Champions juegan a lo mismo, a superar lo del año pasado por inverosímil que parezca, pero con la diferencia que el Farsa lo hace para ir aumentando el ridículo y el Real para ir agrandando su leyenda.
Esta es la diferencia entre un equipo de perdedores y tramposos como el Farsa y el club más grande de toda la historia del fútbol, el Real Madrid.