Aquella mítica carrera de Mónaco en el 84 en la que el Karma actuó con dureza...
El director de carrera, un francés para más señas, detuvo la carrera cuando un joven desconocido llamado Ayrton Senna con un Toleman de mitad de la parrilla se acercaba, bajo una lluvia constante e incesante, al incontestable McLaren de Prost. Este ganó la carrera y el joven brasileño hizo segundo. Como no cumplieron todas las vueltas repartieron la mitad de puntos.
Al final de año, esa decisión perjudicó a Prost y fue otra leyenda, el grandísimo Niki Lauda, el que se llevara el WDC por solo 0,5 puntos de diferencia.
Anecdóticamente, en esa carrera no fue Senna el que realizó la mayor de las gestas. Un joven piloto alemán apellidado Bellof estaba reventando los tiempos antes de que su Tyrrel se fuera al carajo. Este alemán de prometedora carrera y que tuvo durante años, si no recuerdo mal, el tiempo más rápido en "El infierno verde" también conocido como Norsdchleife encontró la muerte en Eau Rouge tras un choque con Jackie Icks en septiembre del 85
De no haber sido por este trágico incidente, Senna y Prost habrían tenido que liudar con un piloto a su altura
Sí, soy un frikazo de la F1...