M. Priede
Será en Octubre
- Desde
- 14 Sep 2011
- Mensajes
- 48.872
- Reputación
- 108.312
Yo creo que sí la perdió. Levantó esperanzas en mucha gente; incluso en mí, que pienso siempre sin esperanza, alejándola todo lo posible para no engañarme, para tratar de ver la realidad lo más fríamente posible.
Sostengo que lo de España no tiene arreglo sin que la izquierda fuerce a la derecha, puesto que ésta no sólo es tan nefasta como la izquierda sino que además carece de la capacidad de lucha y perseverancia de la izquierda. Pensé que venía un cambio en la izquierda; ya digo: esperanza estulta la mía. Lo último. Lo que faltaba: negociar con Bildu la anexión de Navarra al País Vasco:
Podemos no descarta la anexión de Navarra al País Vasco - Libertad Digital
"España está mal enseñada y mal aprendida", repite Monedero. Tiene razón; y lo está -pero eso no lo dice- gracias a gente como él, convencido de que España es un puro imaginario, que lo que aparece en la historia es invención fachosa. Por eso favorecer a los nacionalistas vascos y catalanes, "seduciendo", que dice Errejón (como si ése no fuese el discurso de los 70, 80 y 90 que tantos réditos dio a los nacionalistas a cambio de los crímenes que padecimos) es progresista y lo contrario fascista.
Añádase que el Trío Dinámico aporta otro mal -por si fueran ya pocos- que a España la viene triturando desde hace dos siglos: lo de "esto lo arreglo yo". "Si yo fuera presidente". "Si a mí me dejaran gobernar". Y siempre acaba en lo mismo: ocurrencias que los fautores se toman por genialidades y demonización del que discrepe.
Veamos el artículo (al pie veréis la capacidad crítica que tienen los lectores de izquierda. No hay más que adjetivos contra el columnista).
Ignacio Urquizu:
En que son una versión extremista de IU incluso a la hora de pactar con el PSOE. Eso dice el autor, y estoy totalmente de acuerdo. Lo estamos viendo todos.El éxito de Podemos ha sido analizado en múltiples artículos en los últimos meses. Básicamente, y resumiendo mucho, su gran valor fue conectar con el estado de ánimo de los españoles. Cuando la sociedad estaba desencatada y desorientada, la formación de Pablo Iglesias fue capaz de ofrecer un relato que mostraba una gran empatía con la ciudadanía. Desde luego que no es una cuestión baladí. La política consiste básicamente en esto, como ha repetido en múltiples ocasiones Felipe González: en hacerse cargo del estado de ánimo de la gente. El resultado de esta conexión con los ciudadanos ha sido el gran aumento de su intención de voto en las encuestas.
Pero una vez logró este paso tan importante, parece que ha fallado en los siguientes. Los retos que tenía Podemos por delante eran dos: organizar equipos solventes y presentar un programa reformista. Y en ambas cuestiones ha acabado siendo la versión 2.0 de Izquierda Unida. ¿En qué sentido?
Y a traicionar a sus antiguos compañeros, entre ellos a Gaspar Llamazares, al que el Imperio del Caos puso en una diana. A cambio estos sujetos aprueban que debe de ser castigado quien discrepe de la versión oficial del 11-m. Aparte el apoyo al genocidio de Libia y al de Siria (ya van 3,8 millones de refugiados sirios y éstos sujetos empecinados con "sacar del gobierno a los franquistas").Si analizamos con detenimiento a muchos de sus cuadros, vemos caras jóvenes y no tan jóvenes que estaban hasta hace no mucho en IU. Un ejemplo paradigmático fue Violeta Barba en Aragón, quien semanas antes de postularse como líder de Podemos-Aragón era la coordinadora de juventud de Izquierda Unida-Aragón. Y no ha sido el único caso. De hecho, gran parte de sus máximos dirigentes y fundadores de esta formación eran asesores de IU. Por lo tanto, Podemos se ha ido nutriendo de unos cuadros con una ideología muy determinada.
El reformismo viene de la mano de C´s y la gente lo está viendo; cuanto más tiempo pase más difícil se les pondrá a estos docentes dogmáticos. El reformismo de Podemos pasa por pactar con Zapatero y Bono, que ésos no son casta. Lo contrario sería revolucionario, es decir: darle la razón a Teresa Rodríguez. Así que ni reformismo ni revolución: pasteleo y reparto de cargos y dictar a los demás cómo se tienen que comportar: VIOGEN, Educación para la Ciudadanía, soflamas progretario-masónicas a todas horas, como Zapatero. Lo de siempreY esta última cuestión está muy relacionada con la ausencia de un proyecto político reformista. Que los principales dirigentes provengan de posiciones muy a la izquierda ha determinado que muchas de sus propuestas programáticas se enmarquen justamente en ese ámbito ideológico. Esto no es ni bueno ni malo, es únicamente el resultado del proceso que ha vivido Podemos en su proceso de creación.
Totalmente de acuerdo.El principal problema de esta configuración programática es que esto ya no conecta con la mayoría de la ciudadanía. Como se ha visto encuesta tras encuesta, España es un país que se ubica mayoritariamente en el centro-izquierda y cada vez que ha votado ha huido de los extremismos ideológicos. Por ello, el riesgo que tiene ahora mismo Podemos es en convertirse en una versión “moderna” de Izquierda Unida. Y de hecho los datos comienzan a apuntar en esta dirección. Dos ejemplos.
El primero de ellos lo vemos en el clima social de abril de Metroscopia que publicaba este domingo El País. Mostraba que el principal descenso de Podemos se ha producido entre los votantes progresistas, que son los que comparte con el PSOE. Por lo tanto, la formación de Pablo Iglesias comienza a perder la confianza de la izquierda más moderada.
El segundo ejemplo lo encontramos en las elecciones andaluzas. La suma de IU-Andalucía y Podemos fue del 21,7% de los votos y ambas organizaciones de forma conjunta lograron 20 diputados. Estos datos coinciden con los mejores resultados que ha tenido Izquierda Unida en Andalucía, que fue en 1994.
En definitiva, es muy probable que Podemos haya perdido su oportunidad. Los españoles querían un programa de cambio que mejorase todo aquello que ha funcionado mal en nuestro país en los últimos años. Pero Podemos sólo ha sido capaz de ofrecer los mismos cuadros y las mismas propuestas programáticas que venía ofertando Izquierda Unida. De hecho, los dirigentes de esta última formación vienen denunciando de forma sistemática la opa hostil a la que están siendo sometidos. Los dirigentes de Podemos supieron diagnosticar el desencanto de la ciudadanía, pero no han sido capaces de ofrecer una alternativa realista de modernización del país.
Artículo completo:
¿Perdió Podemos su oportunidad?