La gran mayoría son ex-albañiles, ex-pintores, ex-peluqueras, que piden dinero para:
Montar bar, comercio de alimentación o en su defecto frutería
Montar zapatería
Montar peluquería
Todo ese sector de puntos de venta está hipermasificado. Sobran puntos de venta en todos lados. Basta dar una pequeña vuelta por cualquier barrio de cualquier pueblo o ciudad. Grande o pequeña, da igual. Sobran. No es la crisis sólo, es que no hay demanda para cubrir la macro oferta de bares, peluquerías, zapaterías. A no ser los que lo montan pero a nivel premium, diferenciando productos o servicios con alta calidad y precio alto.
En España no sabemos hacer otra cosa que lo de siempre. Bar, zapatería, peluquería. O la burbuja de tiendas de ropa basura de todo 1 euro y cosas así.
Eso es economía de cambio de cromos. No sirve para nada si las cosas van mal. Lo que da valor a la economía de un país es la tecnología, las herramientas, fabricar objetos útiles que resuelvan problemas y tengan demanda. Pero estar en el euro para tener la misma economía que en 1993 no sirve de nada.
Son pepitos que en su día se hipotecaron a 30 años creyendo hacer el negocio del siglo. El gran problema de nuestra nación es la estupidez, la ignorancia, la soberbia y la envidia. Perdemos a los críos en los colegios con muchas horas de educación física, religión, conocimientos del medio y otras chorraditas que de nada les servirán, en lugar de darles varias horas a la semana y desde bien pequeños de educación financiera. Grabarles a fuego: endeudarse debe ser algo excepcional, no lo general. Capitalizaciones, matemáticas financieras, pedagogia del ahorro y lo valioso del crédito.