Antonio Clement, el galardonado inventor panameño define la necesidades energéticas con una hipotética situación: “Si una nave espacial, tan enorme como aquellas de la película Independence Day, llegara a la tierra y los tripulantes anunciaran: les traemos petróleo gratis, no nos estarían haciendo un favor, sino un inmenso daño.”
Hoy, con una bicicleta que genera energía, está llevando luz a zonas apartadas de Panamá. Sa llama “Eco generador de baja revolución a pedal”, y la aplicación básicamente es la de un generador que almacena energía en una batería, gracias al movimiento que se le da pedaleando.
Los moradores de las comunidades beneficiadas, como la de Bajo Boquerón, en la provincia de Colón, y en la cuenca del Canal, deben pedalear una hora en la bicicleta estática y tendrán carga para alimentar cuatro bombillas de alto rendimiento con luminosidad similar a la de un bombilla de 60 watts. Pueden iluminar un aula de clase o un rancho comunal cinco días, cargar sus moviles o la batería de un ordenador. Se puede pedalear todos los días unos minutos para mantener la carga completa.
Añadió que cada bombilla cuesta 20 dólares y tiene 10 mil horas de duración, y una empresa privada está patrocinando la construcción de estos novedosos generadores para llevarlos a las comunidades apartadas, que los necesitan para alumbrarse.