Esta fiesta empezó con Aznar, eso que no se nos olvide nunca. Zapatero fue un mero embrace and extend.
PP y PSOE son las dos caras de la misma moneda en este asunto.
El PSOE engorda su clientela paguitera y emplea a decenas de miles de personas en la "industria" inmigracionista, mientras que el PP beneficia a la generación langosta proveyendo miles de inquilinos para sus hez-zulos, mano de obra barata para ciertos empresaurios y un ejército de reserva que discipline a la mano de obra local.
Ambos quieren llenar el país de personas de baja cualificación en contra de los intereses de las clases trabajadoras que los sustentan.
Una razón más para jamás votar a estos partidos traidores, ni a sus neo-clones, Ciudadanos y Podemos.