Una película que presenta como romántica la relación lgtb de un hombre con un menor, hacia el Oscar
Una película que presenta como romántica la relación lgtb de un hombre con un menor, hacia el Oscar
Algunos críticos quieren situarla en la carrera a los Óscar, aprovechando la controversia que genera el intento de hacer pasar como romántica y normal la relación gays entre un joven de 28 años y un menor de 17.
Juan María Piñero -
29/11/2017
Fotograma de la película 'Call Me By Your Name'
Casi cada año Hollywood sitúa en la carrera para los Óscar a películas con un trasfondo político o de protesta por algún tema.
Al margen de su calidad estrictamente cinematográfica (un buen guión, o dirección e intérpretes notables)
sirven de arietes ideológicos para promover, por ejemplo, la gaysidad o la relación entre adultos y menores.
Son los casos de American beauty, Moonlight o Brokeback mountain (el western dirigido por Ang Lee con cowboys gayses).
Con
'Call Me by Your Name', se vuelve a ese tema, pero desde una relación gays entre un joven de 28 años con un menor de 17 años. Es decir,
una película sobre pederastia, tal y como lo explican en Lifesitenews.
Desde revistas y medios del
establishment progre norteamericano, no han faltado críticas positivas, catalogando la película como
“la película más romántica del año“, “la película favorita a los Óscar” o “
un triunfo erótico, aguda emocionalmente y abrumadoramente sensual”.
Curiosamente cuando Hollywood está sumida en numerosos casos de abuso sensual y de autoridad, aparece esta película que justamente glorifica los comportamientos que critica en la vida real.
La película es propaganda. A finales de los 80 se inició un plan para normalizar en la sociedad la gaysidad, con sus derechos, no intentando persuadir a la gente de que la gaysidad era algo bueno, sino buscando que simplemente la aceptaran como algo más.
Y visto el éxito,
lo que ahora se busca es normalizar la pederastia. Y para ello, lo que funciona es
presentarlo en películas y en la tele como algo normal.
Y para ello
juegan con los límites y los casos extremos, campaña que siempre ha funcionado también para la aprobación del aborto o el divorcio. En este caso, la película se ambienta en Italia donde la edad de consentimiento son los 14 años -no así en Estados Unidos y muchos otros países occidentales-.
Además,
dibujan una relación en la que es el menor el que busca al adulto, por lo que diluyen la imagen del hombre depredador.
¿Pero es un menor de edad consciente psicológicamente de lo que significa una relación de pareja? ¿Y esa relación con un adulto?
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