lowfour
Crackity Jones
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Hola hamijos
Pues si. Después de ocho años como microempresario he tirado la toalla… temporalmente. Estaba hasta los narices de pagar impuestos y lidiar con clientes idiotas y quería centrarme en mis webs. Además leyendo el foro me ha entrado un cierto canguelo sobre el futuro socio-económico-político de la UE, y no quiero que si el castillo de naipes comience a caer me pille literalmente en trapos menores.
En otras palabras. Soy un auténtico y digno heredero de los empresaurios patrios, inútiles y cobardes. Uno de la estirpe de gloriosos prohombres como Diaz Ferrán… aunque no he dejado ningún pufo y no he quebrado, simplemente pongo en pausa mi empresa para replantearme mi negocio y mi futuro.
La verdad es que he cometido varios errores de bulto. El principal es equivocarme de producto y no tener la agilidad suficiente para reconvertirme 100% a otro producto. En cierta medida lo logré, pero creo que demasiado tarde y demasiado tímidamente.
Por otra parte he cometido el error de cualquier empresaurio de boina enroscada que se precie, y es no crecer rápidamente y contratar a especialistas para poder dedicar mis esfuerzos a cuidar los clientes. Los clientes es otro de mis errores. Seguramente porque me parecían una sarta de gañanes muchos de ellos, no puse todo el esmero que hubiera sido deseable.
Y por último, y esta es la más vergonzante, siendo un especialista en marketing online no le dediqué casi tiempo a mi propia promoción, lanzando mi web (ojo al dato) en septiembre del año pasado. Siete años después de funcionar a todo gas.
Vamos, cagada tras cagada hasta cantar bingo. Aún así, estoy muy satisfecho pues en estos ocho años aprendí lo que no está escrito, gané bastante pasta y me hice con una cartera de clientes que deja a la altura del betún a un montón de empresas de solera. Pero estaba cansado. No me quiero dedicar al B2B sino al consumidor final. Y el hecho de vivir en Suecia no me lo ha puesto fácil (aunque he triunfado con los clientes suecos).
Bueno, al tema. La cuestión es que mientras lanzo varias webs más, y optimizo las actuales, he sido contratado com estratega web y especialista en marketing online por una empresa de unos 20 empleados en el centro de Estocolmo. Es una empresa que ha recibido un galardón muy reputado por su crecimiento rápido año a año. Se dedica a optimizar los procesos de venta de otras empresas en el mundo real y en el mundo del internés.
Mi única experiencia laboral anterior ha sido en laboratorios, en un gran medio de comunicación y en startups suecas. Y de esto hacía ya 10 años. Estas son mis primeras impresiones tras unas semanas de trabajo:
1) Cada lunes la empresa nos trae un desayuno que te mueres para que hablemos entre todos de lo que hacemos en la empresa.
2) Nada más empezar me han puesto un super portátil de Apple, pantallón de 27 pulgadas, iphone y la cuenta de la empresa y privada pagada.
3) Horario de trabajo: de 8 :30 a 17:30, con una hora de comida, pero puedo llegar y me puedo marchar cuando me salga de las narices. Nadie te pregunta nada ni te mira raro.
4) Los jefes me recibieron con una buena comilona el primer día.
5) Mi CEO se sienta pantalla con pantalla y es un tío estupendo. El miércoles nos ha invitado a su casa a hacer una parrillada y tomar cervezas para hablar del futuro. El otro día se trajo a su bebé de tres meses al trabajo. Y cada día me llega con una canción nueva de los 90, porque somos dos viejos indies.
6) Las reuniones con nuestro grupo se hacen sentados en los famosos sillones egg diseñados por Arne Jacobsen, comiendo helado con fresas. El resto de las reuniones se hacen en unas salitas amuebladas con sillas de Eames.
7) Cualquier software que he necesitado se ha comprado en el momento. Sin preguntas.
8) Puedo trabajar desde donde me de la gana. Desde Madrid incluso.
9) Lo mejor: No han parado de reconocer mi trabajo desde que he llegado. Es una sensación extrañísima.
10) Tenemos masajista cada semana. (Esto también lo hay en Madrid)
11) Salario bastante bueno para lo que hay en Suecia.
12) 5 semanas de vacaciones, más días típicos festivos, más días de libre disposición cuando te de la gana (dentro de lo razonable, claro está)
13) Los viernes, cervecita en en la empresa.
14) Después del verano nos vamos de conferencia/holidays a Tel Aviv, todos los gastos pagados.
No escribo esto para dar envidia a nadie. Escribo porque yo mismo me he quedado sorprendido de cómo currando de esta forma tan tranquila y esas horas se puede generar tanto dinero. Está claro. Es la productividad. Hacen cosas de altísimo valor añadido, que son apreciadas por los clientes… clientes que pagan lo que vale.
Y por otra parte, en ese ambiente de trabajo los empleados son mucho más productivos. En España lo típico es estar tomando cafés criticando a los jefes o simplemente dando por el trastero.
Hay empresas en España que ya son así, que tienen medidas de conciliación… pero hay muchas otras que son agujeros personas de color insalubres, de paredes mugrientas y empleados atemorizados. Donde el trepismo está institucionalizado y donde los orates campan a sus anchas aterrorizando al personal y destruyendo las empresas.
En estos días estamos hablando de que en Burbuja está naciendo una nueva forma de pensar que ha de liderar el cambio de modelo productivo español. Coincido plenamente y creo que debemos seguir a Suecia como modelo en muchas cosas, pero especialmente en las relaciones laborales.
Pues eso... No atan los perros con longaniza... pero con salchichas del DIA si.
Pues si. Después de ocho años como microempresario he tirado la toalla… temporalmente. Estaba hasta los narices de pagar impuestos y lidiar con clientes idiotas y quería centrarme en mis webs. Además leyendo el foro me ha entrado un cierto canguelo sobre el futuro socio-económico-político de la UE, y no quiero que si el castillo de naipes comience a caer me pille literalmente en trapos menores.
En otras palabras. Soy un auténtico y digno heredero de los empresaurios patrios, inútiles y cobardes. Uno de la estirpe de gloriosos prohombres como Diaz Ferrán… aunque no he dejado ningún pufo y no he quebrado, simplemente pongo en pausa mi empresa para replantearme mi negocio y mi futuro.
La verdad es que he cometido varios errores de bulto. El principal es equivocarme de producto y no tener la agilidad suficiente para reconvertirme 100% a otro producto. En cierta medida lo logré, pero creo que demasiado tarde y demasiado tímidamente.
Por otra parte he cometido el error de cualquier empresaurio de boina enroscada que se precie, y es no crecer rápidamente y contratar a especialistas para poder dedicar mis esfuerzos a cuidar los clientes. Los clientes es otro de mis errores. Seguramente porque me parecían una sarta de gañanes muchos de ellos, no puse todo el esmero que hubiera sido deseable.
Y por último, y esta es la más vergonzante, siendo un especialista en marketing online no le dediqué casi tiempo a mi propia promoción, lanzando mi web (ojo al dato) en septiembre del año pasado. Siete años después de funcionar a todo gas.
Vamos, cagada tras cagada hasta cantar bingo. Aún así, estoy muy satisfecho pues en estos ocho años aprendí lo que no está escrito, gané bastante pasta y me hice con una cartera de clientes que deja a la altura del betún a un montón de empresas de solera. Pero estaba cansado. No me quiero dedicar al B2B sino al consumidor final. Y el hecho de vivir en Suecia no me lo ha puesto fácil (aunque he triunfado con los clientes suecos).
Bueno, al tema. La cuestión es que mientras lanzo varias webs más, y optimizo las actuales, he sido contratado com estratega web y especialista en marketing online por una empresa de unos 20 empleados en el centro de Estocolmo. Es una empresa que ha recibido un galardón muy reputado por su crecimiento rápido año a año. Se dedica a optimizar los procesos de venta de otras empresas en el mundo real y en el mundo del internés.
Mi única experiencia laboral anterior ha sido en laboratorios, en un gran medio de comunicación y en startups suecas. Y de esto hacía ya 10 años. Estas son mis primeras impresiones tras unas semanas de trabajo:
1) Cada lunes la empresa nos trae un desayuno que te mueres para que hablemos entre todos de lo que hacemos en la empresa.
2) Nada más empezar me han puesto un super portátil de Apple, pantallón de 27 pulgadas, iphone y la cuenta de la empresa y privada pagada.
3) Horario de trabajo: de 8 :30 a 17:30, con una hora de comida, pero puedo llegar y me puedo marchar cuando me salga de las narices. Nadie te pregunta nada ni te mira raro.
4) Los jefes me recibieron con una buena comilona el primer día.
5) Mi CEO se sienta pantalla con pantalla y es un tío estupendo. El miércoles nos ha invitado a su casa a hacer una parrillada y tomar cervezas para hablar del futuro. El otro día se trajo a su bebé de tres meses al trabajo. Y cada día me llega con una canción nueva de los 90, porque somos dos viejos indies.
6) Las reuniones con nuestro grupo se hacen sentados en los famosos sillones egg diseñados por Arne Jacobsen, comiendo helado con fresas. El resto de las reuniones se hacen en unas salitas amuebladas con sillas de Eames.
7) Cualquier software que he necesitado se ha comprado en el momento. Sin preguntas.
8) Puedo trabajar desde donde me de la gana. Desde Madrid incluso.
9) Lo mejor: No han parado de reconocer mi trabajo desde que he llegado. Es una sensación extrañísima.
10) Tenemos masajista cada semana. (Esto también lo hay en Madrid)
11) Salario bastante bueno para lo que hay en Suecia.
12) 5 semanas de vacaciones, más días típicos festivos, más días de libre disposición cuando te de la gana (dentro de lo razonable, claro está)
13) Los viernes, cervecita en en la empresa.
14) Después del verano nos vamos de conferencia/holidays a Tel Aviv, todos los gastos pagados.
No escribo esto para dar envidia a nadie. Escribo porque yo mismo me he quedado sorprendido de cómo currando de esta forma tan tranquila y esas horas se puede generar tanto dinero. Está claro. Es la productividad. Hacen cosas de altísimo valor añadido, que son apreciadas por los clientes… clientes que pagan lo que vale.
Y por otra parte, en ese ambiente de trabajo los empleados son mucho más productivos. En España lo típico es estar tomando cafés criticando a los jefes o simplemente dando por el trastero.
Hay empresas en España que ya son así, que tienen medidas de conciliación… pero hay muchas otras que son agujeros personas de color insalubres, de paredes mugrientas y empleados atemorizados. Donde el trepismo está institucionalizado y donde los orates campan a sus anchas aterrorizando al personal y destruyendo las empresas.
En estos días estamos hablando de que en Burbuja está naciendo una nueva forma de pensar que ha de liderar el cambio de modelo productivo español. Coincido plenamente y creo que debemos seguir a Suecia como modelo en muchas cosas, pero especialmente en las relaciones laborales.
Pues eso... No atan los perros con longaniza... pero con salchichas del DIA si.
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