Estrafalarius
Madmaxista
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Ante todo, quiero dejar claro que mi postura es, sin duda, rotundamente y sin matices, ambigua.
No creo que la inmi gración sea mala per se. Hay foreros en el extranjero que seguro que opinan que su presencia ahí hace más rico al país y más felices a las mujeres. Si pensaran que la inmi gración es mala siempre, dada la naturalhonestidad y bondad del conforero medio, se habrían vuelto a pesar de que a ellos les resultara beneficiosa.
Pero al grano:
Lo que traigo es un texto para comentar. Un texto bastante bien razonado a partir de unos modelos demasiado simples pero que, en general, es favorable a la inmi gración.
Dado que en el foro la opinión es más bien la opuesta, me gustaría abrir con esto un debate serio, razonado y amigable en el que como gente educada razonáramos nuestras posturas en base a argumentos sólidos, razonamientos basados en modelos económicos reconocidos, referencias historicas, aportaciones desde el punto de vista de la economía, sociología...
Lo que obtendré será una jaula de grillos de bestias babeantes escupiendo prejuicios progres buenrrrollistas y satanizaciones retrógradas que harían sonrojar a un tertuliano de intereconomía.
Pero bueno, ahí va:
Los contraintuitivos efectos económicos de la inmi gración
PD: Me juego una cerveza a que no llegamos al post #10 sin descalificaciones personales. :rolleye:
No creo que la inmi gración sea mala per se. Hay foreros en el extranjero que seguro que opinan que su presencia ahí hace más rico al país y más felices a las mujeres. Si pensaran que la inmi gración es mala siempre, dada la naturalhonestidad y bondad del conforero medio, se habrían vuelto a pesar de que a ellos les resultara beneficiosa.
Pero al grano:
Lo que traigo es un texto para comentar. Un texto bastante bien razonado a partir de unos modelos demasiado simples pero que, en general, es favorable a la inmi gración.
Dado que en el foro la opinión es más bien la opuesta, me gustaría abrir con esto un debate serio, razonado y amigable en el que como gente educada razonáramos nuestras posturas en base a argumentos sólidos, razonamientos basados en modelos económicos reconocidos, referencias historicas, aportaciones desde el punto de vista de la economía, sociología...
Lo que obtendré será una jaula de grillos de bestias babeantes escupiendo prejuicios progres buenrrrollistas y satanizaciones retrógradas que harían sonrojar a un tertuliano de intereconomía.
Pero bueno, ahí va:
Los contraintuitivos efectos económicos de la inmi gración
Como contrapunto, el primer comentario al post:El otro día un compañero me preguntaba sobre el efecto que tiene la inmi gración sobre el mercado de trabajo doméstico. Me explicaba que había oído que era posible que una entrada de pagapensiones no tuviera un efecto negativo, ni sobre el empleo, ni sobre los salarios. ¿Cómo era esto posible?
Me hizo gracia porque me pareció un ejemplo de un caso en el que funcionar con un modelo de libro de primero de carrera permite ver cosas relativamente contraintuitivas. Para entender esto, vamos a ir por partes. Vamos a suponer un país dónde únicamente se produzca un bien: las patatas. Estamos en una situación dónde todos los trabajadores tienen un empleo y se emparejan con cada hectárea de tierra para producir patatas. Al final de cada año, un superordenador se hace con el total de la cosecha y la reparte entre el conjunto de los trabajadores (en nuestra economía no hay capitalistas). Ahora, vamos a meterle al modelo un shock migratorio: de repente, entran masivamente un montón de pagapensiones en el país de forma que la mano de obra se dobla. ¿Cuál es el efecto sobre el empleo y los salarios? La respuesta razonable es que va a depender de cómo asumamos que varía la producción de patatas al variar la mano de obra.
Una primera –y extrema- posibilidad es que tengamos una tecnología con lo que en economía se llama “coeficientes fijos”. Esta es la situación en la que para producir cada patata hace falta una combinación exacta de tierra y trabajo. Cada unidad de tierra (trabajo) adicional dado el trabajo (tierra) no aporta nada a la producción total. En esta situación, dependiendo de cómo funcione el mercado (del que aquí hemos hecho abstracción con nuestro superordenador), lo que veremos será un montón de pagapensiones en paro o los salarios divididos por la mitad, o una combinación de ambos. Una posibilidad alternativa es que el trabajo funcione con lo que llamamos “rendimientos decrecientes”. La idea es que al duplicarse el número de trabajadores, la cantidad producida de patatas aumenta, pero no llega a doblarse. El efecto es que las patatas a las que toca cada trabajador van a ser menor (el salario de equilibrio caerá) o bien una parte de los pagapensiones irán al paro. Ambos casos dan cuenta de lo que se suele tener en mente cuando se habla del efecto económico de la inmi gración.
Sin embargo, una alternativa es que la producción de patatas aumente proporcionalmente (rendmientos constantes) o más que proporcionalmente (rendimientos crecientes) con la duplicación de la mano de obra. En este caso lo que ocurrirá es que el salario (el empleo) se mantendrá constante o aumentará (!), dado que cuando se reparte la producción entre trabajadores hay lo mismo o más para repartir.
Llegados a este punto, me gustaría hacer una pausa e invitaros a pensar en como un tema aparentemente tan politizado como el efecto económico de la inmi gración depende tanto de algo tan tremendamente técnico y sobre lo que a menos que uno sea un especialista solo puede ser agnóstico como la naturaleza de la tecnología que impera en una economía. Para vuestra curiosidad, os diré que sobre un tema parecido, hubo un grupo de economistas que se pegaron unos cuantos palos hace unas pocas décadas.
Pero aún así, en general, da la impresión de que en una economía normal, con un stock de capital fijo a medio plazo, lo razonable es asumir que el trabajo tiene rendimientos decrecientes y el efecto de un aumento de la mano de obra disponible será tirar para abajo los salarios ¿o no? Bueno, pues tal vez sí, pero no necesariamente.
Si complicamos una pizca el modelito, podemos ver que esto no es necesariamente así. Para eso, lo único que necesitamos es meter complementariedades en el modelo. ¿Qué son complementariedades? Primero, complementariedades entre bienes: si por ejemplo tenemos un sector que produce filetes y otro que produce patatas y ambos son bienes complementarios (cuando aumenta la demanda de uno aumenta la del otro), al aumentar la cantidad de filetes disponibles, aumentará también la demanda de patatas, su producción y la demanda de trabajadores en el sector de las patatas.
En segundo lugar, complementariedades entre trabajadores. Supongamos que en nuestro modelo todos los trabajadores nacionales son ingenieros agrónomos. Las patatas se pueden cultivar de forma “moderna” (un ingeniero se empareja con dos agricultores) o “antigua” (solo producimos con agricultores) –y suponemos que la primera es más productiva que la segunda. En una situación inicial, tendremos a muchos ingenieros ocupando puestos de agricultores, es decir, sobrecualificados para lo que hacen (o bien, podemos suponer que algunos estarán en paro). Si de repente entran un montón de pagapensiones sin cualificación en el país, los ingenieros que trabajan como agricultores podrán dejar sus puestos a los recién llegados y pasar a trabajar como ingenieros o los que estén en paro empezar a emparejarse con agricultores. El resultado “curioso” es que aunque la mano de obra que ha entrado ha sido poco cualificada, el efecto habrá sido como si hubieran entrado un tercio de ingenieros y dos tercios de agricultores en el país.
Un ejemplo algo más realista es el caso en que repente entra una cantidad considerable de trabajadoras extranjeras que están dispuestas a cuidar a los niños de las mujeres con estudios universitarios de un país, es posible –y probable- que éstas decidan ocupar puestos de cuadros o cuadro medios en empresas o abriendo empresas que aumentará la demanda de trabajadores menos cualificados.
Lo que intento subrayaros con este post no es que la inmi gración tenga necesariamente efectos económicos (los sociales y políticos son otra historia) positivos (aunque mi lectura es que, en general, sí los tiene) sobre el país receptor. Lo que he intentado subrayar es que la conclusión común que circula por la calle de “nos quitan el trabajo” sólo es cierta bajo ciertos supuestos relativamente restrictivos, lo cuáles tienen poco que ver con la ideología de cada cuál y, sobre todo, que el problema es sustancialmente más complicado y que por eso usar un modelo para entender es totalmente imprescindible.
Me gustaría invitar al debate sobre todo a nuestros conforeros emigrantes. ¿Creen ellos que la inmi gración es mala, que es un coladero de vil canalla que invade y embrutece un país con el único fin de lucrarse a expensas de los nativos y llevar la delincuencia? ¿Cómo creen ellos que enriquecen el país en el que viven? ¿Cómo reciben otros países a los pagapensiones? ¿Hay diferencias entre los pagapensiones de esos países y los venidos a España? En fin... todo lo que pueda contar un insider.En los modelos que detallas puede ser de muchos modos porque depende, como dices, de lo que se complique el modelo.
En el mundo real, y en nuestro país, concretamente, el modelo tiene que pasar pro los siguientes puntos.:
-Que llegan a un país donde ya hay desempleo. Y ya me contarás cómo pueden ser crecientes los rendimientos en un país incapaz de emplear ya, de por sí, a una parte de su fuerza de trabajo.
-Que llegan a una economía orientada al mercado, no a al producción. Nuestro problema no es de producción, sino de productividad y de mercados. No hay una clara escasez de nada en las estanterías de las tiendas.
-Que llegan a un país donde no hay escasez de mano de obra no cualificada, que es la que mayoritariamente ofrecen.
Con estos tres puntos, a mí, personalmente, me parece que la inmi gración conduce indefectiblemente a una reducción salarial.
Otro día, si quieres, hablamos de lo que supone para cualquier empresa convertir en accionista a alguien que no paga por serlo. O sea, una ampliación de capital gratuita a los externos, y sin derechos preferentes de suscripción para los accionistas que pagaron. Y nos reiremos…
PD: Me juego una cerveza a que no llegamos al post #10 sin descalificaciones personales. :rolleye: