No sé la razón por la cual os empeñáis en tratar de medir lo tiesos que están los españoles por el gasto en ocio.
Hay un refrán en el mundo agrícola que reza, traducido, algo como que vale más la pena perder un "amo" (trabajo) que una costumbre.
Aquí donde vivo antes se quita de comer lo que sea a la semana un tío, que de ir al bar a almorzar. O de ir de cerveceo.
La gente, mientras tenga una peseta para quemar en ocio, mantiene la ilusión (ficticia), de que todo se va a arreglar.
En nuestra empresa gestionamos sociedades y están todos acojonados (proveedores, grandes propietarios, contables, etc): ventas a la mitad o menos, gastos fijos y de materias primas por las nubes (lo de la luz es para fusilarlos, en algunos casos), morosidad.......
Los empresarios con solera, que ya han pasado épocas de vérselas putas, han despedido a todo el que han podido, incluso reducido horarios de apertura, para "sobrevivir" con lo mínimo.
Yo viví 2008, y esto es mucho más grave.