¿Europa? Súfranla ahora en sus carnes, gargantas y pulmones. Si -casualmente- desde 2002 pagamos una barra de pan al doble de su precio, no podemos devaluar y da aquí se han llevado hasta los remaches… le llamaron crisis, prestando ese € al pepito que pagó el bocata de sardinas (marroquíes) al doble de su precio. Eso sí , en baguette, que suena ‘chic’.
Llevamos lustros trincados por los ovariones, con la industria hecha ruinas, la sanidad en picado y atados en corto por un dogal-moneda que no es más ni menos que eso. Sin políticas fiscales únicas, ni de seguridad, ni de exteriores ni de justicia. De nada más que el puñetero euro en todo el espectro de 27 zombies cogidos y endeudados hasta el final de los tiempos. Y aquí, aparte de ser uno de los zombies más demacrados estamos rotos en 17 pedazos de higadillos, bilis y gangrenas
Y como salida con los pies por delante, la doktor Lagarde nos ofrece dar de baja de la suscripción de la vida a los mayores mientras que la satánica Greta ¿donde andas, pajarraca? propone comer hormigas y el genarismo y la locura queer o como narices se llama son las tiritas que nos ponen ante una crisis teóricamente sanitaria (lo es) para finiquitar definitivamente los estados nación y las soberanías estatales y lo poco-paco populares que teníamos. Miles de suicidios silenciados avalan la desesperación del tercio de pobres que no afrontan -no pueden- renovar la lavadora.
Ese era el plan. Y ahora, acelerando. Disfruten de lo votado y consolidado en urnas. El mecanismo sutil de voladura ¿controlada? usando en Cor-19 camufla el hundimiento. Cuánto dolor.