paconan
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cobi19: ¿Debemos temer la transmisión del ganado a los humanos?
El SARS-CoV-2 está causando uno de los peores desafíos mundiales en el siglo XXI en este momento. El bichito es miembro de la familia de los coronaviridae y pertenece a los bichito ARN. Se supone que el bichito fue transmitido por animales salvajes en un mercado húmedo en China. Si el bichito proviene de animales salvajes, ¿es posible que también se pueda transmitir a nuestros animales de granja y viceversa? Existe una considerable confusión en el mercado. En India, por ejemplo, las ventas de carne de aves de corral se redujeron en un 80% desde enero, debido a los rumores de que uno podría contraer el bichito al comer pollo.
cobi19: ¡nada nuevo en la agricultura!
Para las personas que trabajan en el sector agrícola, los cobi19 no son desconocidos. Los productores de ganado a menudo luchan contra la diarrea en terneros recién nacidos y contra la disentería invernal en ganado adulto joven. Los criadores de cerdos conocen muy bien la diarrea epidémica porcina (PED) y la gastroenteritis transmisible (TGE). Los avicultores banderillan a sus animales contra la bronquitis infecciosa (IB). ¿Son todas estas enfermedades causadas por los mismos bichito? ¡No! Los diferentes miembros de la familia del cobi19 son responsables.
La mayoría de los cobi19 son específicos de cada especie y tejido.
Para infectar animales o humanos, las proteínas espiga que forman la corona (la “corona”) del cobi19 deben unirse a las moléculas receptoras en las células objetivo de los tejidos del huésped. La unión es altamente específica, al igual que una cerradura y su clave específica van juntas, o cómo un anticuerpo se une a un patógeno particular. El SARS-CoV-2, por ejemplo, necesita una proteína particular de la membrana celular (enzima convertidora de angiotensina 2 – ACE2) para ingresar a las células humanas; Los bichito TGE, por otro lado, dependen de la aminopeptidasa N porcina (ANPEP). Las células de los cerdos tienen otras moléculas receptoras que las células de las aves de corral. Las células del tracto gastrointestinal son diferentes de las células del tracto respiratorio (Russ, 2020).
cobi19 en cerdos
Para los cerdos, cinco cobi19 son relevantes. El bichito de la diarrea epizoótica porcina (PEDV) y el bichito de la gastroenteritis transmisible (TGEV) pertenecen al género α. Muestran una alta afinidad por las células epiteliales del tracto gastrointestinal. El cobi19 respiratorio porcino (PRCV) también es un representante del género α, pero no muestra ninguna afinidad con las células epiteliales gastrointestinales. Causa enfermedades respiratorias. Los otros bichito son el bichito de la encefalomielitis hemaglutinante responsable de la enfermedad por vómitos y emaciación y perteneciente al género β, y el cobi19 delta porcino (PDCoV), que causa diarrea (Stiebnitz, 2017).
cobi19 en aves de corral
La bronquitis infecciosa causada por un cobi19 perteneciente al género γ, es una de las principales enfermedades respiratorias económicamente críticas en las aves de corral. Como también afecta el riñón y el tracto reproductivo, las consecuencias son daño renal, disminución de la producción de huevo y mala calidad del huevo. Otro problema importante de IB en aves de corral es la rápida propagación. Dentro de las 48 horas, toda una parvada puede infectarse y seguir siendo un reservorio de bichito, incluso después de la recuperación. Por lo general, la infección es horizontal, de gallina a gallina, no de gallina a polluelo. Sin embargo, también es posible la infección a través de la cáscara de las narices contaminados en los criaderos (MacLachlan y Dubovi, 2016).
cobi19 en ganado vacuno
Los síntomas asociados con los cobi19 bovinos son diarrea de terneros, disentería de invierno (diarrea hemorrágica) en bovinos adultos e infecciones respiratorias en animales de varias edades (MacLachlan y Dubovi, 2016). El cobi19 bovino pertenece al género ß. El cobi19 bovino no es tan específico del huésped como muchos otros cobi19. Puede infectar perros, pavos y otros rumiantes salvajes, como los waterbucks, las jirafas o los venados de cola blanca.
¿Se puede intercambiar el SARS-CoV-2 entre humanos y ganado?
El SARS-CoV-2, como el MERS-CoV (Síndrome Respiratorio del Medio Oriente) y el SARS-CoV (2002/03), pertenece al género ß de cobi19. Los tres pueden infectar a animales y humanos, lo que se puede ver por la forma en que se propagan: El SARS-CoV se originó de los murciélagos, el MERS-CoV fue transmitido por los camellos, y para el SARS-CoV-2, se supone que los murciélagos (Zhou et al., 2020) pero también los pangolines (Zhang, 2020) son la fuente. Pero no animales de ganado.
Hay un caso conocido de un lechón infectado con SARS-CoV, que fue descubierto en China en el contexto de una investigación sobre la epidemia de SARS en 2002 (Chen, 2005). Científicos de la Academia de Ciencias de China en Beijing examinaron seis especies animales que viven en contacto cercano con humanos y encontraron a este lechón infectado por SARS-CoV de origen humano. Como la única persona que tuvo contacto con el lechón resultó negativa para el cobi19 varias veces, se concluyó que la infección probablemente provenía de alimentos contaminados con bichito. Los cerdos en las zonas rurales de China a menudo son alimentados con las sobras de los restaurantes.
Por ahora: mantén la calma
Hoy, no hay indicios científicos de que el ganado pueda contraer SARS-CoV-2 de humanos o viceversa. En Alemania, el Instituto Friedrich Löffler (2020), un instituto de investigación líder en enfermedades epizoóticas, está llevando a cabo estudios exhaustivos en este momento para comprender mejor la sensibilidad de los animales hacia el SARS-CoV-2. Se esperan resultados confiables a principios de abril. Hasta entonces, mantengamos la calma y comportémonos de manera responsable para enfrentar estos tiempos inquietantes.
By Inge Heinzl, Editor and Rafael Pedrazuela, Global Technical Manager Swine
https://www.agromeat.com/290019/corona-debemos-temer-la-transmision-del-ganado-a-los-humanos
El SARS-CoV-2 está causando uno de los peores desafíos mundiales en el siglo XXI en este momento. El bichito es miembro de la familia de los coronaviridae y pertenece a los bichito ARN. Se supone que el bichito fue transmitido por animales salvajes en un mercado húmedo en China. Si el bichito proviene de animales salvajes, ¿es posible que también se pueda transmitir a nuestros animales de granja y viceversa? Existe una considerable confusión en el mercado. En India, por ejemplo, las ventas de carne de aves de corral se redujeron en un 80% desde enero, debido a los rumores de que uno podría contraer el bichito al comer pollo.
cobi19: ¡nada nuevo en la agricultura!
Para las personas que trabajan en el sector agrícola, los cobi19 no son desconocidos. Los productores de ganado a menudo luchan contra la diarrea en terneros recién nacidos y contra la disentería invernal en ganado adulto joven. Los criadores de cerdos conocen muy bien la diarrea epidémica porcina (PED) y la gastroenteritis transmisible (TGE). Los avicultores banderillan a sus animales contra la bronquitis infecciosa (IB). ¿Son todas estas enfermedades causadas por los mismos bichito? ¡No! Los diferentes miembros de la familia del cobi19 son responsables.
La mayoría de los cobi19 son específicos de cada especie y tejido.
Para infectar animales o humanos, las proteínas espiga que forman la corona (la “corona”) del cobi19 deben unirse a las moléculas receptoras en las células objetivo de los tejidos del huésped. La unión es altamente específica, al igual que una cerradura y su clave específica van juntas, o cómo un anticuerpo se une a un patógeno particular. El SARS-CoV-2, por ejemplo, necesita una proteína particular de la membrana celular (enzima convertidora de angiotensina 2 – ACE2) para ingresar a las células humanas; Los bichito TGE, por otro lado, dependen de la aminopeptidasa N porcina (ANPEP). Las células de los cerdos tienen otras moléculas receptoras que las células de las aves de corral. Las células del tracto gastrointestinal son diferentes de las células del tracto respiratorio (Russ, 2020).
cobi19 en cerdos
Para los cerdos, cinco cobi19 son relevantes. El bichito de la diarrea epizoótica porcina (PEDV) y el bichito de la gastroenteritis transmisible (TGEV) pertenecen al género α. Muestran una alta afinidad por las células epiteliales del tracto gastrointestinal. El cobi19 respiratorio porcino (PRCV) también es un representante del género α, pero no muestra ninguna afinidad con las células epiteliales gastrointestinales. Causa enfermedades respiratorias. Los otros bichito son el bichito de la encefalomielitis hemaglutinante responsable de la enfermedad por vómitos y emaciación y perteneciente al género β, y el cobi19 delta porcino (PDCoV), que causa diarrea (Stiebnitz, 2017).
cobi19 en aves de corral
La bronquitis infecciosa causada por un cobi19 perteneciente al género γ, es una de las principales enfermedades respiratorias económicamente críticas en las aves de corral. Como también afecta el riñón y el tracto reproductivo, las consecuencias son daño renal, disminución de la producción de huevo y mala calidad del huevo. Otro problema importante de IB en aves de corral es la rápida propagación. Dentro de las 48 horas, toda una parvada puede infectarse y seguir siendo un reservorio de bichito, incluso después de la recuperación. Por lo general, la infección es horizontal, de gallina a gallina, no de gallina a polluelo. Sin embargo, también es posible la infección a través de la cáscara de las narices contaminados en los criaderos (MacLachlan y Dubovi, 2016).
cobi19 en ganado vacuno
Los síntomas asociados con los cobi19 bovinos son diarrea de terneros, disentería de invierno (diarrea hemorrágica) en bovinos adultos e infecciones respiratorias en animales de varias edades (MacLachlan y Dubovi, 2016). El cobi19 bovino pertenece al género ß. El cobi19 bovino no es tan específico del huésped como muchos otros cobi19. Puede infectar perros, pavos y otros rumiantes salvajes, como los waterbucks, las jirafas o los venados de cola blanca.
¿Se puede intercambiar el SARS-CoV-2 entre humanos y ganado?
El SARS-CoV-2, como el MERS-CoV (Síndrome Respiratorio del Medio Oriente) y el SARS-CoV (2002/03), pertenece al género ß de cobi19. Los tres pueden infectar a animales y humanos, lo que se puede ver por la forma en que se propagan: El SARS-CoV se originó de los murciélagos, el MERS-CoV fue transmitido por los camellos, y para el SARS-CoV-2, se supone que los murciélagos (Zhou et al., 2020) pero también los pangolines (Zhang, 2020) son la fuente. Pero no animales de ganado.
Hay un caso conocido de un lechón infectado con SARS-CoV, que fue descubierto en China en el contexto de una investigación sobre la epidemia de SARS en 2002 (Chen, 2005). Científicos de la Academia de Ciencias de China en Beijing examinaron seis especies animales que viven en contacto cercano con humanos y encontraron a este lechón infectado por SARS-CoV de origen humano. Como la única persona que tuvo contacto con el lechón resultó negativa para el cobi19 varias veces, se concluyó que la infección probablemente provenía de alimentos contaminados con bichito. Los cerdos en las zonas rurales de China a menudo son alimentados con las sobras de los restaurantes.
Por ahora: mantén la calma
Hoy, no hay indicios científicos de que el ganado pueda contraer SARS-CoV-2 de humanos o viceversa. En Alemania, el Instituto Friedrich Löffler (2020), un instituto de investigación líder en enfermedades epizoóticas, está llevando a cabo estudios exhaustivos en este momento para comprender mejor la sensibilidad de los animales hacia el SARS-CoV-2. Se esperan resultados confiables a principios de abril. Hasta entonces, mantengamos la calma y comportémonos de manera responsable para enfrentar estos tiempos inquietantes.
By Inge Heinzl, Editor and Rafael Pedrazuela, Global Technical Manager Swine
https://www.agromeat.com/290019/corona-debemos-temer-la-transmision-del-ganado-a-los-humanos
