Ser un paraíso fiscal ayuda.
Aunque en los otros post ha dicho la realidad.
Suiza no es un paraíso fiscal. Suiza tiene una deuda pública de alrededor del 50% del PIB, no tiene déficit y tiene un gasto público de unos 25.000 euros por año y habitante, algo más de 2.000 euros por mes (220.000 millones de Euros para 8.5 millones de habitantes)
España tiene un gasto público menor que la mitad, unos 11.000 euros por habitante y año, menos de 1000 euros por mes, y a pesar de eso España tiene una deuda de 130% del PIB (real más del 300% del PIB) y un déficit monstruoso.
Algunos de los servicios públicos, los que dependen de los salarios, son más caros en Suiza: los salarios de maestros o médicos de la Sanidad Pública pero muchos otros tienen el mismo coste en España y en Suiza: por ejemplo un km de carretera casi cuesta lo mismo y un equipo de scanner clínico o un quirófano tienen el mismo coste.
Eso significa que con una presión fiscal mucho menor, relativa a la renta del suizo medio, Suiza podría proporcionar a sus ciudadanos unos servicios públicos mejores. Como muchos suizos tienen ingresos lo bastante altos como para pagarse su sanidad o su educación privadas, los servicios públicos se concentran en una parte menor de la población, lo que hace que esos servicios públicos, educación o sanidad públicas, sean mucho mejores en Suiza.
La relación entre el saqueo fiscal y los derechos de los ciudadanos es inversa: los ciudadanos son más libres y tienen mejores servicios públicos cuanto más baja sea la presión fiscal.
El país con mayor presión fiscal del mundo es Argentina, el segundo España. La economía más destruida por la fantasía el bichito es la argentina, la segunda la española.