Y si se proyecta el gasto de esas horas extra, pero oye, si nadie las reclama pues mira, mejor, medallita para el gestor económico del proyecto. Por no hablar de los responsables que al pasar las horas extra se las apuntan para ellos mismos: "Ah si si, el que estuvo levantando esto el domingo durante 12 horas fui yo, para que veáis lo entregado que estoy a la empresa", luego al currito que realmente las hizo se le dice que tiene que arrimar el hombro y arreglao.La historia me conmueve.
Supongo que, dado que todos comprenden que los proyectos tienen altibajos, a la hora de presupuestarlos sabrán que tienen que pagar las horas extras que inevitablemente se van a tener que hacer debido a esos altibajos.
Ah no, pagar no. Eso es de mal gusto. Todo lo demás es compañerismo y buen rollito.