InigoMontoya
CENSURADO POR querido líder
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El otro dia en un rato muerto me dio por leer leyendas, rituales y anecdotas de esas tierras de fama dantesca. Di con una de un cura de mentrida de la edad media tardia que hablaba del procedimiento habitual a seguir en caso de que una mujer muestre signos de neurosis.
En aquel tiempo cuando a una tia se le cruzaban los cables pensaban que estaba amando a escondidas con demonios y que el leche de estos se maceraba en su interior, envenenando su sangre y espiritu con humores malignos.
El procedimiento que recomendaban en las iglesias que aun conocen las viejas de los pueblos sagreños y siguen recomendandolo a sus nietas es el siguiente.
Al notarse una rara, con el animo sobresaltado, cojase un vaso de arcilla, llenese de 4 dedos de aceite y metase dentro un ajo y un rosario. Dejese macerar 1 semana. Al octavo dia cojase el rosario y metase en el interior de la vagina mientras se recita un ave maria. Al decimo tercer dia sacase el rosario mientras se pronuncia un padre nuestro.
Esta practica, por increible que parezca siguen practicandola en la sagra y pasa de generacion en generacion de abuelas a madres y madre a hijas. Por eso si algun dia haceis un dedo a una tia de la sagra y al sacarlo os huele a ajo ya sabeis por que.
En aquel tiempo cuando a una tia se le cruzaban los cables pensaban que estaba amando a escondidas con demonios y que el leche de estos se maceraba en su interior, envenenando su sangre y espiritu con humores malignos.
El procedimiento que recomendaban en las iglesias que aun conocen las viejas de los pueblos sagreños y siguen recomendandolo a sus nietas es el siguiente.
Al notarse una rara, con el animo sobresaltado, cojase un vaso de arcilla, llenese de 4 dedos de aceite y metase dentro un ajo y un rosario. Dejese macerar 1 semana. Al octavo dia cojase el rosario y metase en el interior de la vagina mientras se recita un ave maria. Al decimo tercer dia sacase el rosario mientras se pronuncia un padre nuestro.
Esta practica, por increible que parezca siguen practicandola en la sagra y pasa de generacion en generacion de abuelas a madres y madre a hijas. Por eso si algun dia haceis un dedo a una tia de la sagra y al sacarlo os huele a ajo ya sabeis por que.