Pa los jovenes algo despiertos este progresismo huele a berenjena de rojo viejo.
Ni los gays quieren que los colectivicen y los conviertan en una masa informe para usar como arma arrojadiza en batallas politicas.
Es que imagínate lo que tienen que padecer ahora los veinteañeros en las universidades, especialmente si son hombres, blancos y heterosexuales: pancartas, mensajes y consignas a favor del feminazismo, el anticapitalismo, los okupas, la lucha antifranquista, aunque ya haya pasado casi medio siglo de aquello, la III república plurinacional, el prusés, incluso fuera de Cataluña, la neo-religión del ecologismo, el multiculturalismo, el blanqueamiento de la invasión moronegroide, la agenda LGTBI, el veganismo...
Es que no me jorobes, ahora lo revolucionario es ser de derechas, y no es ninguna exageración. Paradojas de la vida y de los tiempos que nos han tocado vivir.